La Policía Nacional destaca la ausencia de incidentes graves en la fiesta del ascenso

La fiesta que vivió la ciudad entera por el ascenso a Primera División del Xerez Club Deportivo se desarrolló con total normalidad, como especificó la Policía Nacional a través de un comunicado, dentro de un balance positivo en el que se destacó la ausencia total de incidentes graves. Desde las 15.00 horas del pasado sábado, los agentes ya activaron la primera fase del dispositivo preventivo con el objetivo primordial de garantizar el orden público y la seguridad ciudadana.

El plan de actuación estuvo coordinado de forma conjunta por los dos Cuerpos de Policía de Jerez, con el apoyo de 150 funcionarios procedentes de la Unidad de Intervención Policial de Sevilla (UIP, conocidos como los antidisturbios), y miembros de las Unidades de Prevención y Reacción (UPR) de otras comisarías como las de San Fernando, El Puerto de Santa María y Cádiz. En las intervenciones realizadas, cabe destacar la incautación de varias entradas que estaban siendo ofrecidas en las inmediaciones del Estadio Municipal de Chapín a modo de reventa, así como la detección de varios carteristas que aprovecharon la asistencia masiva de público para llevar a cabo su actividad delictiva.

Conviene recordar que en el dispositivo de seguridad también intervinieron los voluntarios de Protección Civil; los servicios de seguridad privada del campo; los sanitarios del 061 y diversos efectivos del Parque de Bomberos. Una colaboración que propició «un buen resultado», según la Policía Nacional, en lo concerniente al orden público, especialmente en los momentos anteriores y durante la celebración del partido de fútbol. Con posterioridad, los jugadores recorrieron las principales calles de la ciudad en un autobús descapotable, siguiendo un completo itinerario en el que tampoco se registraron incidencias dignas de mención.

Momentos de tensión

En las zonas de mayor aglomeración de aficionados, sin embargo, sí se vivieron ciertos momentos de tensión que acabaron con cargas policiales ante la actuación de algunos vándalos. Esto sucedió especialmente en la plaza del Arenal, tras la retirada del equipo, donde a alrededor de las 02.00 horas se sucedieron algunas reyertas y hubo personas que arrojaron botellas y otros objetos contundentes contra los agentes.

Uno de ellos, precisamente, impactó en la cabeza de un ciudadano que se encontraba celebrando el ascenso con sus hijos y que tuvo que ser trasladado al Hospital del SAS de Jerez, como ha podido saber este periódico, donde le curaron la herida que afortunadamente no revistió gravedad. Los alborotadores, con la euforia del momento, también causaron algunos destrozos en locales comerciales del centro, aunque de escasa consideración. A pesar de estos hechos aislados, la Policía se da por satisfecha y asegura haber tomado buena nota para poder prestar un servicio con las mismas garantías en los eventos de este tipo que acoja la ciudad en un futuro.