El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán. / SUR
ANDALUCÍA

Desafíos de futuro en época de crisis

Griñán asume la Presidencia con una cifra cercana al millón de parados, retos inaplazables en educación, infraestructuras, turismo y vivienda, y con el firme compromiso de agilizar la Administración

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El Gobierno de José Antonio Griñán sigue un sendero marcado con miguitas de pan. El camino quedó fijado en el discurso de investidura de Manuel Chaves en abril del pasado año. No obstante, y pese a que el nuevo peregrino cumplirá todos los compromisos del programa electoral con el que los socialistas se presentaron a las pasadas elecciones, Griñán ha querido sumar algunos retos que constituirán la 'hoja de ruta' que guiará su labor hasta 2012. Al presidente de la Junta de Andalucía no lo queda otra ante el inicio de una legislatura en la que asume el timón de mando sin el respaldo de las urnas y atestada de interrogantes por mor de la crisis económica.

ECONOMÍA

Luchar contra el desempleo

Objetivo prioritario

José Antonio Griñán llega a la Casa Rosa con una tasa de paro en Andalucía del 24,04%, sólo superada por Canarias y Melilla, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). El guarismo se traduce en dramática realidad: En estos momentos la Comunidad tiene 944.100 personas paradas, 382.500 más que hace un año.

La alarma que estos datos provocan en la ciudadanía quedaron patentes en las distintas manifestaciones convocadas el viernes por los sindicatos -y cuyo acto central acogió Málaga al ostentar la tasa de paro más alta de Andalucía (27,18%)-. Concentraciones menos festivas y más reivindicativas que en años anteriores y que sirvieron de excusa a los agentes sociales para exigir más empleo, protección social e inversión pública ante la crisis.

En su discurso de investidura Griñán dejó patente que antepone la lucha contra el desempleo a cualquier otra encomienda. Para ello considera imprescindible dar seguridad jurídica a las empresas y apostar por la iniciativa privada.

Asimismo, comprometió nuevas prestaciones para intentar que en cada unidad familiar andaluza haya al menos uno de sus miembros con ingresos. A este reto personal se adhiere el desafío de renovar el acuerdo de concertación social, que expiró el 1 de enero y en el que se integran la Junta, empresarios y sindicatos. El empeño del ex presidente consistía en firmarlo antes de final de año, pero la crisis y la postura de la patronal lo impidió. Misión de Griñán será lograr el consenso que sirva para reorientar el modelo de crecimiento y fomentar la competitividad y la exportación.

El cierre de la financiación autonómica forma parte también de la larga lista de lances del presidente, que ha descargado lastre en Carmen Martínez Aguayo, una persona de su absoluta confianza.

EDUCACIÓN

Eje vertebrador

La gran apuesta

«Todo lo que inviertes en ella te lo devuelve». Griñán verbaliza con esta frase una de sus grandes apuestas, la educación. El mandatario autonómico quiere poner cura a la inadecuada formación de los aspirantes a lograr un trabajo. Tarea no le va a faltar.

A la nueva consejera de Educación le toca encarar las estadísticas sobre el incremento de alumnos de 16 años que sale del instituto sin graduarse -eso que llaman fracaso escolar y que en Andalucía se sitúa en el 30%- o la del abandono prematuro de las aulas -el 37,1% de los jóvenes deja los pupitres después de la ESO, un porcentaje superior a la media española (31%) y muy por encima de la europea (15,3%)-.

Mar Moreno tendrá que poner paz en un sistema educativo en pie de guerra a tenor del adelanto del curso escolar; preocupado por la falta de colegios para atender la demanda existente en las principales zonas de expansión; además de resentido ante un Plan de Calidad que empujó a la calle a profesores y alumnos.

DESCENTRALIZACIÓN

Más agilidad

Sin manufactura sevillana

La descentralización juega un papel vital en el discurso del presidente. Se comprometió con ella ante el Pleno del Parlamento durante el debate de investidura, y lo volvió a hacer este jueves en su primera visita institucional a Málaga.

El presidente pretende que los ayuntamientos dejen de ser entes dedicados a prestar servicios para convertirse, con el pertinente respaldo normativo y financiero, en gobiernos con capacidad de gestionar políticas. «Hay competencias ahora ejercidas por la Junta que pueden perfectamente ejercer, con mayor proximidad y eficacia, las corporaciones locales», resumió Griñán.

Destacó que esa descentralización política «no se seguirá por relación de jerarquía, sino de cooperación» y que habrá «otra descentralización administrativa en las decisiones que se toman desde Sevilla hoy y que pueden tomarse por la Junta en sus organismos periféricos o territoriales», explicó.

La contrapartida es clara, se ganará en agilidad al burlar la manufactura hispalense; pero el peaje será alto ya que, según apuntó esta semana en Cádiz el consejero de Gobernación, Luis Pizarro, requerirá «mucho diálogo» con los alcaldes de los 770 municipios andaluces, los ocho presidentes de las diputaciones y los diferentes partidos políticos «sean del color que sean».

Una parte de este proceso de descentralización vendrá de la mano del proyecto de ley de régimen local, que deberá concretar las competencias básicas de los ayuntamientos y los recursos para ejercerlas.

A veces, los dichos erran, pues no siempre 'las cosas de palacio van despacio'. Pizarro apuntó que el Gobierno se fija como plazo el final del año para realizar un diagnóstico y establecer un marco jurídico que resuelva el «reto» de la descentralización.

Ejemplo de esa presteza sirva la decisión de Griñán de despachar en la ciudad de Málaga de forma periódica -cada 15 días aproximadamente-, con una agenda de temas malagueños y atendiendo a agentes sociales y colectivos de la provincia.

INFRAESTRUCTURAS

Ganar en proximidad

El corredor ferroviario toma impulso

La ejecución del corredor ferroviario de la Costa del Sol será una de las grandes prioridades para Rosa Aguilar. Una línea que unirá Málaga con Mijas, Marbella y Estepona y que el presidente describió como «una obra costosa pero que merece la pena». En su visita a la ciudad apuntó que la idea es que el corredor tenga un trazado alternativo al Cercanías para que el viaje sea de 30 ó 35 minutos y compatible con el AVE. Precisamente, sobre las vías y bajo la catenaria, la nueva consejera de Obras Públicas no debe descuidar el proyecto para que el tren de alta velocidad vertebre Andalucía en 2013, año en el que está previsto que las ocho capitales andaluzas estén conectadas por este medio.

La ampliación de la red de autovías será otra de las cuestiones que acapare su atención. Sobre el asfalto la Junta seguirá trabajando en un entramado que complete el ya existente, con inversiones en la autovía del Olivar, Almanzora, Jaén-Córdoba, Iznalloz-Guadix, la continuación de la Jerez-Arcos hacia Algodonales, la conexión de la Ruta de la Plata entre Zalamea y Santa Olalla y la autovía del Guadalhorce.

Tras la puesta en servicio de la línea 1 del metro de Sevilla, en esta legislatura deberán entrar en funcionamiento, al menos en parte, los metros de Málaga y Granada; además del tren-tranvía de la Bahía de Cádiz y los servicios tranviarios de Huelva, Almería, Sevilla, Córdoba, Jaén y Jerez.

TURISMO

Un sector en tiempo de mudanza

Levantar una verdadera industria

Tres son los ejes que rigen el turismo hoy: El auge de un viajero que confecciona sus salidas a golpe de 'ratón'; el despegue de Internet como canal de comercialización que obliga al sector turístico a modernizar sus estrategias; y una crisis global que enfría la demanda, agudiza la estacionalidad e impacta directamente en mercados vitales para el destino andaluz como son Reino Unido, Alemania y Francia. Andalucía tiene en marcha importantes planes con los que hacer frente a estos cambios y adaptarse a la que está considerada como una auténtica revolución en la forma de viajar. El reto del consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, es hacer del turismo una verdadera industria.

Los datos avalan a este sector como la piedra angular de la economía andaluza: Supone el 12,5% del PIB de la Comunidad, genera unos ingresos de 16.500 millones de euros y da empleo a más de 425.000 personas al año, lo que equivale al 13% de los ocupados andaluces. Pero, además, juega también un papel fundamental como elemento de atracción de capital, ya que acumula el 8% del volumen de inversión anual total de Andalucía.

La Consejería de Turismo mantiene abiertas varias líneas de actuación que abarcan desde la apuesta por la innovación hasta planes específicos para poner en valor destinos turísticos del interior, ciudades medias y capitales.

A la cabeza, por la fuerte inversión con la que cuenta, está el Plan Qualifica, con el que se pretende relanzar a nivel internacional la Costa del Sol. Se trata de una iniciativa turística pionera en el país, dotada con un presupuesto de 335 millones, una partida sin precedentes para acometer la modernización de un destino maduro.

Asimismo, consciente la Consejería de la revolución tecnológica, la innovación se convierte en una pieza clave para que Andalucía siga siendo competitiva. La creación del laboratorio turístico más importante de España y el lanzamiento de un nuevo portal en Internet son dos de los grandes proyectos en los que trabaja la Junta para que el sector se convierta, por derecho propio, en una industria pujante con futuro y capacidad para asumir los cambios.

VIVIENDA

Frentes abiertos

Plan financiero de apoyo a las VPO

Bajo el mandato de Griñán debe llegar al Parlamento la norma que regule el derecho a la vivienda de los andaluces con ingresos inferiores a 3.000 euros mensuales. El compromiso del presidente es complementar esta iniciativa con un plan financiero de apoyo a la VPO que amplíe la oferta de alquiler con opción a compra. La actividad inmobiliaria ha caído drásticamente, a tenor de los datos de transacciones y el número de hipotecas. Ni siquiera la bajada de precio que experimentó la vivienda libre en el primer trimestre -5,5%-, ha sido capaz de animar el maltrecho bolsillo de los andaluces y reducir el parque de viviendas de nueva construcción cuya venta ha quedado paralizada.

El presidente recordó en su investidura que constructores y promotores están sufriendo de forma especial por sus necesidades de financiación. Metió el dedo en la llaga. He aquí otro reto de la 'era Griñán', auxiliar al sector en su asfixia económica. Hizo hincapié en la necesidad de poner en marcha medidas «inmediatas» que reactiven el ladrillo a través de una política de inversión en obra civil y residencial. El empeño se antoja faraónico. A ello, se suma la indefinición de multitud de planes urbanísticos que impiden reactivar el sector.