Galloso, inmortal en El Puerto

En Ronda, Córdoba, Chiclana o El Puerto. Todas las ciudades con tradición taurina tienen un museo en el que recrear los gustos de la afición y todas esas plazas, lugares de encuentro entre memoria y presente llevan el nombre de un insigne maestro. El de José Luis Galloso está indisolublemente asociado a su Puerto de Santa María natal, pero no fue hasta ayer cuando homenajeado y aficionados vieron cumplido el sueño.

El Museo Taurino José Luis Galloso, sito en las Bodegas El Cortijo, en la calle Pozos Dulce, abría este fin de semana sus puertas tras un emotivo acto de presentación en el que participaron los promotores, José Luis Muñoz Barrero -en representación de la peña taurina José Luis Galloso- y Francisco Custodio Cárdenas -de las Bodegas El Cortijo y Restaurante Los Portales-. El alcalde de la ciudad, Enrique Moresco y el subdelegado de Gobierno de la Junta en Cádiz, José Antonio Gómez Periñán, con sus presencias, demostraron la importancia de esta apertura.

Y es que se produce en el mismo año en el que la plaza de toros de El Puerto se convertirá, muy problamente, en testigo de la reaparición del diestro. Hace dos meses escasos, se producía, además, otro de los retos del universo del toro portuense, la puesta en marca de su Escuela Taurina, de la que Galloso es su director artístico.

Sus púpilos ya pueden verse reflejados en el museo de la Bodegas El Cortijo, abierto tras dos años de preparativos y gracias, entre otros muchos apoyos, a la entrega y tesón del presidente de la peña José Luis Galloso, José Luis Muñoz.

El museo se encuentra ubicado en una de las dependencias de las Bodegas el Cortijo, una galería que contiene más de dos mil piezas relacionadas con la carrera profesional del diestro portuense. Sus trajes de luces, empleados tanto en su etapa de novillero como de matador, los capotes de la confirmación de su alternativa en Madrid, así como el que usó por primera vez en México, motean las cornisas. Entre ellos, cientos de imágenes en blanco y negro que narran los triunfos, la entrega de premios o las visitas protagonizadas por el torero. Estos recuerdos forman parte del inventario de la peña taurina, pero es sobre todo a través de la donación como el museo ha ido creciendo. «Aún faltan muchos más, como el de los calzoncillos que se ponía Galloso para torear», comenta el presidente.

La colección se completa con los trofeos de los premios que otorga anualmente la peña, al mejor tercio de capote, el solera Plaza Real, o el toro bravo. Otras piezas del imaginario taurino, como las muletas o las cabezas de reses también están presentes en la galería.

En los próximos meses el museo se ampliará con la inauguración de una biblioteca dedicada a la Fiesta Nacional. Mientras tanto, la peña organizará semanalmente conferencias en torno a la figura de Galloso y la realidad de los toros de la época en la que se fundó, hace justo 40 años.

Durante el acto de presentación, el alcalde Enrique Moresco resaltó la importancia de que El Puerto contara ya con un museo de estas características. «Vamos a tener un valor más en nuestra ciudad que forma parte de nuestro patrimonio artístico y humano», subrayó.