La duda

Es una posibilidad abstracta. Pongamos un gran almacén de la ciudad (el que hay); mantiene su actividad de 10 de la mañana a 10 de la noche y en ese intervalo de tiempo emplea en la limpieza de sus servicios un promedio de 12 minutos. Al cabo del día ha dedicado (pa una gráfica) una sesentava parte del tiempo que se mantiene abierto a esta limpieza en cada uno de sus servicios, esto es (pa un porcentaje) un 1,6 % del tiempo total... ¿por qué me ocurre que cada vez que quiero ir al servicio en este gran almacén (el que hay), hecho este que apuro al máximo y acometo con juntamiento de pantorrillas, me encuentro el carro de la limpieza cruzado delante de la puerta y dentro a la señora de la ídem...? «Entre en el de minusválidos ». ¿Será mi cara el espejo de mi coco ? Dudo, y dudo que esto me pase a mí sólo, más que nada por lo universal del asunto: la duda, lejos de ofender, es un estado de incertidumbre que se contrapone a la certeza... Pongamos más, «¿Resuelve tus dudas», le ha resuelto sus dudas a la oposición municipal? ¿qué dudas resuelve? ¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? ¿Se asigna el programa al Despojado por carecer de Jesús el Rico? ¿Sería viable asignárselo a Obama...? ¿Vendrá Obama? ¿Es posible que uno de cada dos parados se haya venido a España? ¿Es España el paraíso (terrenal)? ¿Cargarse el paraíso (fiscal) es una cuestión de fe? ¿Puede alguien tener fe en que, tras la reunión del G-20, reviviremos los mundos de Yupi? (bueno, sí, uno, y estuvo allí) ¿Qué es más agobiante, la gráfica o el porcentaje del paro? ¿Es cierto que la secretaria general de Empleo se llama Maravillas? Y en lo que estaba, ¿me tendrá cogido el tempo la señora de la limpieza del gran almacén (el que hay)? Tendrá dudas mejores, no lo dudo, lo jodío es que vamos entrando en una edad chunga pa la cosa de la próstata (mira que ¿empujaría esto a Descartes a sus discursos...?)