Imagen de la prisión de Guantánamo (Cuba) ./ AP
término aplicado por el anterior gobierno de bush

EEUU ya no llamará «combatientes enemigos» a los detenidos en Guantánamo

Obama revisará la política aplicada a quienes sean capturados en conflictos armados u operaciones contra el terrorismo

WASHINGTON Actualizado: Guardar
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El Gobierno del presidente Barack Obama ha anunciado que ya no se referirá a los detenidos en Guantánamo como "combatientes enemigos" y que revisará la política aplicada a quienes sean capturados en conflictos armados u operaciones contra el terrorismo. "El resultado de esa revisión podría conducir a un mayor refinamiento de la posición del Gobierno, que desarrolla una política integral" sobre el problema, ha dicho el Departamento de Justicia en un comunicado.

En el marco de esa política "es esencial que funcionemos de una forma que fortalezca nuestra seguridad nacional y sea consecuente con nuestros valores y regida por la ley", ha manifestado por su parte el secretario de Justicia, Eric Holder. "El cambio que hemos hecho cumple con esas normas y hará más fuerte a nuestra nación", ha agregado.

El Ejecutivo del presidente George W. Bush (2001-2009) comenzó a utilizar el término "combatientes enemigos" para referirse a presuntos terroristas capturados tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. En una orden ejecutiva y para no aplicarles las leyes estadounidenses, Bush creó el centro de detención de Guantánamo (Cuba), lo que supuso su confinamiento sin cargos y de manera indefinida. Sin embargo, en documentos presentados ante un tribunal federal, el Departamento de Justicia indicó hoy que, pese a que no usará el término de "combatientes enemigos" el Gobierno de Obama mantendrá su facultad de retener a los reclusos en Guantánamo, en virtud de una autorización aprobada por el Congreso en septiembre de 2001.

Esa autorización ha permitido "el uso de la fuerza contra naciones, organizaciones o personas que el presidente determine que hayan planeado, autorizado, cometido o ayudado en los ataques de S-11", ha indicado. Los documentos señalaron que "el Gobierno no se atribuye la autoridad de retener personas en base a un apoyo insignificante" a organizaciones terroristas como Al Qaeda o los talibanes.

«Cambio irrelevante»

Los documentos señalaron que "el Gobierno no se atribuye la autoridad de retener personas en base a un apoyo insignificante" a organizaciones terroristas como Al Qaeda o los talibanes. La organización Human Rights Watch ha señalado que, pese a que se abandona el término de "combatientes enemigos", la nueva política no constituye un cambio relevante respecto a "la mal concebida idea de la administración Bush sobre la guerra contra el terrorismo". "Al menos por ahora, la administración de Obama se abroga la facultad de capturar a gente en cualquier parte del mundo sobre la base de su apoyo o asociación con Al Qaeda o el Talibán y de confinarla en detención militar por lo que podría ser el resto de su vida", ha dicho Joanne Mariner, directora del programa sobre terrorismo y contraterrorismo de HRW.

Ha añadido que la única buena noticia es el énfasis de que la posición del Gobierno podría cambiar tras una revisión integral de la política de detención. "Instamos a que el Gobierno de Obama reconsidere sus puntos de vista. Debería procesar a los sospechosos en tribunales federales y no eludir el sistema de justicia criminal", ha añadido. En Guantánamo aún permanecen alrededor de 240 presuntos terroristas y el Gobierno de Obama ha prometido cerrar ese centro de detención en el curso de un año.