Vista de la sede de la EiTB, en el centro de Bilbao, tras la explosión de un coche-bomba en sus inmediaciones en la mañana de Nochevieja. /efe
lucha antiterrorista

La Ertzaintza busca a dos hombres y una mujer relacionados con el atentado contra la sede de la EiTB

La etarra se habría encargado de aparcar la furgoneta-bomba en las inmediaciones del edificio de Bilbao

BILBAO Actualizado: Guardar
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La Ertzaintza busca a tres terroristas relacionados con el atentado perpetrado la mañana de Nochevieja en Bilbao contra la sede central de la radio-televisión vasca (EiTB) y las delegaciones de otros medios de comunicación. Se trata de dos hombres y una mujer que fue quien se encargó de aparcar la furgoneta-bomba cargada con cien kilos de explosivos en la zona posterior del edificio, según han informado fuentes de la lucha antiterrorista.

La mujer colocó la furgoneta-bomba y abandonó a pie el lugar en dirección al barrio de Olabeaga, donde se sospecha que fue recogida por los dos hombres en una Citroen C-2 que había sido sustraída a punta de pistola.

Además, dichas fuentes han confirmado que antes de robar en la localidad vizcaína de Arrigorriaga la Citroen Jumpy que hicieron estallar después, dos terroristas intentaron sustraer una primera furgoneta, pero la conductora del vehículo, presa de los nervios, aceleró en vez de frenar, lo que evitó que los etarras lograran su objetivo.

Bomba en fin de año

La última mañana de 2008 ETA reaparecía destrozando el edificio, compuesto por cristaleras, de la televisión y la radio autonómica vasca, en el que también se encuentran las delegaciones de Onda Cero, Antena 3, El Mundo o Expansión, y que está situado en frente del estadio de San Mamés. La detonación se produjo cinco minutos después del plazo máximo anunciado por un comunicante en nombre de ETA que llamó a los bomberos de Bilbao para avisarles de la colocación del coche-bomba.

Esta llamada hizo que se pudiera acordonar la zona y desalojar el edificio, por lo que no hay que lamentar víctimas, aunque sí numerosos daños materiales que han provocado que la calle donde se produjo la explosión siga cortada hasta que se recojan todos los restos del atentado.

ETA ha querido estar presente, una vez más en plenas fiestas navideñas. La acción terrorista de ayer se produjo un día después de cumplirse dos años del atentado en el aeropuerto de Barajas, que causó la muerte a dos personas, heridas a otras veinte y el derrumbe casi total de uno de los módulos de uno de los garajes, y que supuso la ruptura del alto el fuego que la banda había anunciado nueve meses antes.