La sesión de los insultos

a crispación política que vive la ciudad volvió a quedar ayer de manifiesto en el Pleno ordinario de diciembre. Gobierno y oposición se enfrascaron en discusiones inútiles y en insultos. Algunas de las mejores perlas las protagonizó Manuel Guerrero, portavoz del Partido Andalucista, enfrentado con la edil del PSA, María Ángeles Polanco. Guerrero la calificó de «máquina de ganar dinero» y de «traidora», tras la decisión de ésta de abandonar el cuatripartito. Las viejas rencillas tampoco pasaron desapercibidas entre el ex edil de IU, José Pedro Butrón, y quien representa ahora a esta formación en Chiclana, Nadine Fernández. El primero utilizó casi todos sus turnos de intervención en el Pleno para recordar al alcalde «la ilegalidad del regreso de la señora Fernández a IU», a cuyo Grupo Municipal calificó de «falso».