Precintan un piso por peligro de derrumbe tras un aparatoso incendio en el garaje de la finca

Un piso del número cuatro de la calle Juan XXIII de Vejer tuvo que ser precintado ayer por la tarde, después de originarse un aparatoso incendio en el garaje de la finca. Los bomberos del parque de Conil emplearon más de cuatro horas en un servicio dificultoso que tuvo como consecuencias no sólo la clausura de la vivienda, además, un todoterreno y una moto quedaron calcinados.

Estos vehículos eran los únicos que estaban en el interior del garaje cuando surgió el fuego, cuyo foco se localizó en este punto de la finca, aunque aún se desconocen las causas del incendio. Dos vehículos con cinco efectivos del Consorcio acudieron sobre las tres de la tarde al inmueble, de dos plantas con dos viviendas en cada piso. Al tratar de adentrarse al garaje comprobaron que había mucha carga de calor. Las bovedillas del techo habían reventado y a través de las grietas se había colado el humo a la planta superior. De ahí se fue extendiendo por las zonas comunes del edificio, pasando a lo largo del hueco de la escalera.

Los vecinos del inmueble habían desalojado ya sus pisos cuando llegaron los bomberos y pudieron regresar a sus casas pasadas las siete de la tarde, a excepción de una familia. Los ocupantes de uno de los pisos de la primera planta había resultado afectado por la acumulación de calor. Se trata de la vivienda que se encuentra justo encima del garaje comunitario. Las llamas habían logrado resquebrajar el suelo del piso, donde se observaron diversas grietas.

Un técnico revisó la casa y decidió precintarla ante el riesgo de que la estructura hubiera quedado muy debilitada por la acción del calor y se pudiera producir algún desplome. Las labores de inspección proseguirán hoy para evaluar qué tipo de arreglos requiere la vivienda.

Después de eliminar cualquier conato de llama, los efectivos del Consorcio dedicaron el tramo final de su servicio a enfriar la zona del garaje.