EN VERDAD TE DIGO

Hassan, próximo alcalde

A vueltas con los quioscos: un asunto que ha logrado dividir a la ciudad más que un Barça-Madrid. De ahí al catamarán y tiro porque me toca

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Mabel Caballero: ¿Esto es para ponernos verdes entre nosotros? Si no, menuda emoción. Vaya planazo.

Francisco Apaolaza: Podemos poner verdes a otros. Por ejemplo, a los que se oponen a todo proyecto por sistema. Los que acusan a todos los empresarios de querer llevárselo crudo sin ellos hacer nada.

Mabel: Sí, o a los que dicen que se pueden hacer muchas más viviendas en Cádiz, y muchos más parques y más polideportivos... Pero aquí nadie quiere irse a Puerto Real. ¿Tú no crees que es hora de decir: «Señores, no cabemos más aquí»?

Francisco: ¿Te imaginas lo bien que se va a entrar en Cádiz con el Segundo Puente? ¿Y lo apretados que vamos a estar dentro?

Mabel: Tengo la sensación de que es como la camisa de Antonio Castillo... uno jura que no se podría estirar más, pero se estira... Y está bien que no se quepa, ¿no?

Francisco: Decían los diplomáticos de Guatifó que en la pasada cumbre de Estado se pelearon por lo del ¿Por qué no te callas?, pero que en esta las tortas van a ser por encontrar aparcamiento.

Mabel: Podíamos hacer una moción. Ahora que se habla tanto del carril bici y el Ayuntamiento está dispuesto a entrar en eso, hacer la primera cumbre de jefes de Estado llegando en bicicleta. Así todos los latinoamericanos parecerían suecos, que tampoco les viene mal... Yo mato por ver a Hugo Chávez haciendo equilibrios en una de esas bicis plegables mientras la boina se le escurre y le tapa la visión.

Francisco: No sé si Evo Morales está para esos trotes.

Mabel: Evo ya no estará allí para entonces. Si acaso, mandará su chompa (jersey) de motivos étnicos. A mí me gustaría ver también al latinolover del presidente de Ecuador....

Francisco: Desde luego que aquí no cabe ni un alma, pero en el frente marítimo de South Beach (Miami) tampoco. Esta ciudad debería quitarse los complejos: o crecer (y eso implica crecer hacia arriba o sobre el agua) o aspirar a ser Puerto Banús. Claro, que luego llega uno que quiere poner un bar y lo ponen verde. Hay bastante Paseo Marítimo para que se monte la que se montó por lo de un bar como el de Grosso. Igual se piensa la gente que las personas van a venir con su cartera llena de billetes desde Wisconsin para ver una puesta de sol. Será para verla con una buena manzanilla en la mano ¿no crees?

M.C.: A mí el quiosco de la Caleta me parece tan feo como la estación del catamarán.

Francisco: A mí me parece feo de narices, desde luego. Ahora, que lo quiera derribar la Junta, ¿es que no han visto las barbaridades que se construyen en Zahara o Chiclana? Que la Junta quiere derribar el quiosco... Qué broma. Claro, que igual el Ayuntamiento lo quiere declarar bien de interés cultural para conseguir que no se tire.

Mabel: Es como la Aduana Vieja, sede de Diputación, que no es BIC... Yo opto por darles un descansito a todos, a los de la Junta y a los del Ayuntamiento, en Navidad. Y hacer un Gobierno alternativo... ¿A quién pondrías tú en ese Gobierno?

Francisco: A Hassan, el del Cambalache. Sin duda.

Mabel: Pues yo al Manteca. Y a Benito, el policía.

Francisco: ¿A Tomás, Manteca Hijo? Sois todas iguales. Veis uno guapo y le dais hasta el voto.

Mabel: Hombre, ya que no podemos tener a Obama, mejor tener a Tomás...

Francisco: Yes we can es la antítesis de Cádiz cuando se levanta derrotista.

Mabel: Si Hassan fuera el alcalde sería tan rupturista como Obama en EE UU. ¿Te imaginas? De Cadi, Cadi. Además, a mí me gusta esa (de)cadencia de Cádiz, ese «está todo perdido, pues vamos a pasar el trago como podamos».

Francisco: A veces duele un poco. Subió el Cádiz, que costó lo suyo. Todos a la fuente y eso. Y el primer partido en primera, tocaba con el Madrid. La gente decía que si no nos metían tres estaba bien. Eso me mató. Claro. Aquí una de Valladolid y uno de Donosti arreglando las cosas de Cádiz ¿no? Nos van a sacar cantares.

Mabel: A mí, no. Es que vengo de Valladolid, y desde que Felipe II nos dejó tirados y se llevó la capital a Madrid, no hemos levantado cabeza. Así que, frente a los castellanos pesimistas, los gaditanos me parece que tienen el ego muy buen puesto. Y me parece bien.

Francisco: Llama la atención que siempre va por delante «está sucia», «hay paro», «Puerta Tierra es feo»... «Pero me gusta». Hay complejos. En San Sebastián tienen el Festival de Cine y unas calles preciosas, pero también miserias enormes... La verdad es que me encantaría escuchar a uno de Cádiz hablar de San Sebastián y sus cosas.

Mabel: Creo que aquí la gente sí aprecia lo que tiene. Se da cuenta de que es un lujo tener una playa donde puedes pasar el día sin pagar... O sentarte en los bancos de la plaza San Juan de Dios, los viernes por la mañana, a ver el desfile de los que se casan... Es impagable (salvo en la terraza del Sardinero).

Francisco: Eso es impagable, pero en otro sentido. Se nos termina el espacio. Como a Cádiz.