El triunfo de la comparsa de Paco Alba y la ampliación del Hotel Atlántico
Corría el último mes de 1964 y mientras Benítez Ariza disfrutaba de la celebración familiar, la ciudad daba la bienvenida a Manuel Fraga, ministro de Información y Turismo, que tras visitar Jerez y Arcos inauguraba la ampliación del Hotel Atlántico. Por esas fechas, se abría también por primera vez al público en la calle Santa Inés el Museo Municipal, rebautizado después como Museo de Las Cortes. La sala albergaría objetos valiosos relacionados con la historia de la ciudad, como la majestuosa maqueta plano de la capital, elaborada en caoba y marfil por el teniente coronel de Infantería Alfonso Ximénez.
Actualizado: GuardarEl 1 abril, la prensa de la época se hacía eco de la conmemoración de los 25 años de Paz con Franco, un anuncio que coincidía con la concesión de un indulto general por parte del caudillo. Al mes siguiente, se autorizaba por fin, tras cinco años de gestión, la construcción del Puente Carranza. Una noticia que fue recibida con entusiasmo por la población, que se echó a la calle agradecida, animada por el propio alcalde, José León de Carranza.
En el terreno del Carnaval, la palma se la llevó la comparsa de Paco Alba, Los Fígaros. Ese año, el Gran Teatro Falla se abarrotó como nunca y los aficionados disfrutaron de una final emocionante. La chirigota ganadora fue Los de la oportunidad y en el apartado de coros se produjo un empate entre Los gauchos musicales y el de Puerto Real, Los guerreros del antifaz.
El Museo de las Cortes de Cádiz volvió a abrirse al público aquel 1964 tras 17 años cerrado a causa de la desastrosa explosión de 1947, que provocó cuantiosos daños en el inmueble y en el catálogo del centro que recuerda a los constituyentes del Doce y la magna obra que desarrollaron mientras España se batía para expulsar al francés invasor.
Recién iniciado el verano, el 28 de junio, Francisco Rivera, Paquirri, debutó en Cádiz con picadores. Compartió cartel con José González Copano y Rafael Jiménez Márquez con reses del Marqués de Villamarta. En agosto, Astilleros de Cádiz entregó el buque Elcano, que en ese momento fue el barco más grande construido en España. Se hundió ocho años más tarde tras sufrir una serie de explosiones. Como anécdota, para el chófer de Pemán, José Vera, fue un año de suerte, ya que se llevó las 120.000 pesetas del Gordo del sorteo de los 25 años de Paz.
