Derrota de los Memphis Grizzlies en el regreso de Ginobili

Memphis cayó ante San Antonio por 81-94 en un choque donde los Grizzlies celebraron, en todo caso, el regreso a la pista del escolta de los Spurs Manu Ginobili. El argentino demostró con sus 12 puntos que su tobillo izquierdo está recuperado de la intervención a la que fue sometido en septiembre. «Estoy feliz por cómo me sentí en la cancha, no me resentí de la lesión y encima ganamos», aseguró al término del partido. La muñeca no le tembló en los 11 minutos que jugó en los que firmó 3 de 4 tiros de campo, que incluyen un triple de dos intentos, y 5 de 6 desde la línea de personal. Además, capturó cuatro rebotes.

Los Grizzlies sólo encontraron soporte en los 26 puntos de Mayo Widget, máximo anotador del partido, y en los 10 puntos y ocho rebotes de Marc Gasol. El pívot español anotó 3 de 7 en tiros de campo y estuvo más seguro en el tiro libre (4-5) en los 28 minutos que disputó. Los locales llegaron al descanso con 36 puntos, los dígitos más bajos de la temporada. En el tercer cuarto, la distancia aumentó hasta alcanzar los 17 puntos al término de ese periodo. Una distancia insalvable que apenas disminuyó en el último cuarto. Más suerte tuvo Portland en su ajustada victoria ante Sacramento por 91-90. Ninguno de los españoles tomó parte en el quinteto inicial, algo bastante habitual en los últimos partidos. La ausencia quedó luego justificada por una actuación bastante gris en el encuentro, sobre todo de Rudy Fernández, que en los casi 20 minutos que estuvo en el Rose Garden sólo tiró cuatro veces al aro y anotó tres puntos gracias a un triple. Algo más acertado estuvo el base canario, Sergio Rodríguez, que en 14 minutos fue capaz de anotar dos puntos, dar cuatro asistencias y recuperar tres balones.

El héroe del partido para los locales fue el escolta Brendon Roy, que se convirtió en el máximo anotador del encuentro con 28 puntos merced a un solvente 10 de 19 en tiros de campo que incluye una increíble puntería desde el perímetro (3 de 3). Los Blazers fueron arriba en el marcador durante casi todo el choque, pero en el último cuarto se complicaron la vida y llegaron a ir tres abajo a falta de cinco minutos para terminar (81-84). Los Kings se refugiaron en su alero John Salmons, que sumó 20 puntos y tuvo en su mano la victoria si hubiera acertado con un último tiro a dos segundos de la bocina.