Los del Mora

Hace 18 años que cogimos los bártulos y nos fuimos a Puerto Real. Los que allá por 1980 y tantos formábamos la última plantilla del Mora y que tanto habíamos luchado por que nuestro Hospital se transformara en el Clínico de la Facultad de Medicina de Cádiz enfilábamos el puente Carranza y nos dirigiamos a nuestro «nuevo destino», el Hospital de Puerto Real. Quedaban atrás muchos años de aprender a hacer medicina en «nuestro Mora». Y digo bien, aprender, porque en el vetusto hospital que se cerraba, no sólo se hacía, sino que, día a día, y gracias a la convivencia existente entre todos los que allí estábamos, se aprendía. Se aprendía a sufrir con los pacientes, con sus familiares, con las injusticias administrativas que nos habían mantenido marginados durante años y con las necesidades de un barrio, La Viña, que era el alma del Hospital. En el Mora había un «ambiente» distinto, no sé si mejor o peor que en otros centros sanitarios, de lo que sí estoy convencido es que el «espíritu del Mora» era, y sigue siendo, especial.

El pasado sábado nos hemos vuelto a reunir más de doscientos de aquellos. Se nos convocó, y el viejo espíritu nos hizo acudir a la cita. Nos hemos vuelto a encontrar todos los estamentos que compusimos el personal del Mora: médicos, enfermeros y enfermeras, auxiliares, celadores, limpiadoras, administrativos, todos. En un ambiente festivo nos hemos vuelto a reunir y a rememorar tiempos pasados. Se manifestó, en toda su plenitud, el espíritu de amistad que siempre caracterizó al Mora y que cada vez, por imperativos del sistema sanitario actual, echamos más de menos. El edificio sigue allí, a los pies de la playa de La Caleta pero gracias a Dios su «espíritu» sigue vivo en todos nosotros aunque muchos ya no trabajemos juntos. Hasta la próxima cita.