CCOO critica la indefinición del futuro laboral de los trabajadores y los centros de Aurgi

La Federación Minerometalúrgica de CCOO criticó hoy que los 600 trabajadores de la cadena de venta y distribución de recambios del automóvil Aurgi, que cuenta con 41 centros, el 30 por ciento en Andalucía, "sufren desde hace un año la indefinición de su futuro laboral ante la falta de resolución del proceso concursal en el que la empresa está inmersa".

Desde el sindicato denunciaron la "lentitud" de este procedimiento y "la falta de control" de los administradores concursales de Aurgi. Así, explicaron que esta situación pone "en riesgo" la concreción de una propuesta de compra que garantice la continuidad en el futuro del negocio y del mayor número posible de puestos de trabajo.

De este modo, se están viendo afectados los once centros andaluces de la compañía cuenta, que se encuentran repartidos en Sevilla, con cuatro (dos en la capital, uno en San Juan de Aznalfarache y otro en Alcalá de Guadaíra); dos en Cádiz (en Jerez de la Frontera y en Los Barrios); además un centro en Córdoba, Linares (Jaén), Almería, Granada y Málaga.

"La indefinición del futuro laboral ha provocado un gran número de bajas voluntarias del colectivo de empleados en Aurgi, así como un grave deterioro de los centros de venta con una acusada falta de productos", añadió la organización sindical.

Asimismo, CCOO resaltó que Aurgi presentó este proceso concursal de acreedores en noviembre del año pasado, "pero los administradores concursales no permitieron hasta junio de 2008 la llegada de ofertas para la venta de los activos".

De esta forma, el pasado 1 de octubre se notificó la existencia de dos opciones de compra, pero hasta mediados de ese mes no se informó a la empresa ofertante de los requisitos necesarios para llevar a cabo la compra. "La lentitud del Juzgado de los Mercantil y la dilatación en el tiempo por parte de los administradores concursales está provocando un grave deterioro tanto de las posibilidades de futuro de la empresa como de los puestos de trabajo", subrayaron desde la Federación.

El sindicato explicó que esta situación conlleva "una acusada falta de productos", lo que unido a las dificultades de compra y la la escasez de abastecimiento de los centros "está deteriorando" la imagen de la empresa.

Por otro lado, CCOO destacó que se está llevando a cabo una política de presión sobre los trabajadores de la compañía, en la que se incluyen acciones como sanciones, incumplimientos de acuerdos y denegación de derechos laborales, que busca "provocar por la vía de los hechos consumados la quiebra de la voluntad de los trabajadores que durante más de un año están apostando por el futuro de la empresa".

Para finalizar, la organización sindical manifestó su convencimiento de que "es posible" encontrar una solución que asegure la continuidad de la empresa y de la mayor parte de sus puestos de trabajo.