CÁDIZ

Los vecinos del solar de Santiago 11, piden que también se haga justicia con ellos

Los vecinos de los edificios adyacentes a la finca Santiago, 11 valoraron ayer la decisión de la Audiencia Provincial de dar la razón a los compradores de las casas que iban a construirse en este solar, a pesar de que la sentencia no les haya beneficiado a ellos.

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Los vecinos, aprovecharon ayer para reivindicar que también con ellos se haga justicia, como los máximos afectados por las obras que se realizaban en este suelo y que llegaron a provocar el derrumbe de una de las viviendas cercanas, en el número 3 de la calle Barrocal. «En un principio seguimos igual que antes», explicaba ayer Francisco Muñoz, portavoz de los vecinos, que reclama especialmente al Ayuntamiento de Cádiz que resuelva la compra del solar, después de un año de anunciarlo.

«Nos dijeron que sólo faltaba negociar el justiprecio», afirmaba ayer Francisco Gómez, que sin embargo, reconoce que «aún no tenemos noticia de ellos».

Los vecinos esperan que la decisión de la Audiencia acelere a resolución de las denuncias interpuestas por los vecinos tanto contra los promotores como contra el Ayuntamiento, al que reclaman que se construya en el solar viviendas sociales. Sobre el proceso de sus denuncias, Francisco Gómez apunta que parece que se han reactivado: «Hace poco vino un perito del juzgado», explica.

Un paso más

La sentencia de la Audiencia, con todo, supone un pequeño paso más en la resolución de este polémico caso, y cierra uno de los frentes judiciales que el solar tenía abierto. Con esta decisión, la Audiencia ha obligado a la promotora de la obra del solar, Santiago Once, así como a la empresa Cuasan Cádiz S.L. y a Juan Cuadrado Sánchez (como administrador único de ambas) a indemnizar a los compradores de las viviendas proyectadas en la finca, debiendo devolverles el dinero que estos clientes entregaron como señal, además del «interés legal» de este dinero.

A parte, las empresas deberán pagar el alquiler que estos compradores han tenido que abonar todos estos años, «hasta la fecha en que debieron serle entregadas las viviendas». Este plazo, en realidad, aún no se ha cumplido, ya que es el próximo 7 de marzo de 2009, pero tanto en la sentencia como la defensa de los indemnizados se da por hecho de que, evidentemente, las obras no estarán listas para entonces.