Fotograma de la película 'Las tres habitaciones de la melancolía'.
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Pirjo Honkasalo, sentimiento documentado

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La directora de cine finlandesa ofrece una visión del mundo cargada de sensibilidad y espiritualidad. Dos características unidas a un cine alternativo llegado desde el norte de Europa.

De nombre difícil de pronunciar y apellido enrevesado, la cineasta finlandesa más internacional sabe expresar como pocos los sentimientos a través de la imagen. Para ello no recurre a la palabrería hueca ni a los temas ramplones, de lágrima fácil. Sólo necesita una cámara sobre su hombro.

Comprometida con la realidad que le ha tocado vivir, Honkasalo realiza un tipo de cine social, sin caer en la propaganda política. Trata, y lo logra, de transmitir etapas de la vida, circunstancias y personajes olvidados, las verdades de pueblos castigados como Chechenia. ‘Los tres estadios de la melancolía’ es un claro ejemplo de esto último. En este documental, la directora ha recogido el horror de la guerra a través de los niños, de uno y otro bando. La razón de dicha elección, la explicaba la misma Pirjo en una entrevista a un medio colombiano: “Primero quería hacer una película sobre los adultos, pero luego pensé que sería aún más interesante hacer una película sobre los niños, que todavía no tienen esa imagen tan fuerte, son niños que todavía no saben qué es el matar, aunque algún día se matarán entre ellos, todavía no lo saben. Desde que somos niños los adultos nos construyen imágenes de lo que es el enemigo, y estas imágenes permanecen dentro de nosotros toda nuestra vida y se vuelven invisibles, y ellas nos dictan la manera en que pensamos y la manera en la que actuamos sin tomar conciencia de ello”.

Con más de 35 películas a sus espaldas, entre colaboraciones y títulos propios, la finlandesa presume de una formación envidiable. Estudió en la Escuela de Cine de Finlandia hasta los 21 años. A finales de los 60 continuó sus estudios en la famosa escuela FAMU de Praga, una de las más prestigiosas a nivel europeo en esa época. Finalmente, culminó su preparación en la Universidad de Filadelfia.

Su dilatada formación y el hecho de que Honkasalo haya trabajado como fotógrafa, camarógrafa, técnico de grabación, editora, guionista, actriz, productora, ayudante de dirección y directora, la han dotado de unas cualidades excepcionales como cineasta. Y sus trabajos lo demuestran. Entre los títulos más reconocidos se encuentran historias de todo tipo: ‘Atman’ narra el viaje de dos hermanos, uno de ellos con serias discapacidades, entre el Ganges y las montañas del Himalaya, como tributo a su fallecida madre; ‘Mysterion’ muestra el choque entre el mundo espiritual y el moderno a través de la vida de unas monjas ortodoxas rusas que viven en un convento al nordeste de Estonia. Allí, las religiosas oran y protegen un árbol sagrado al que le atribuyen cualidades milagrosas. Mientras, a pocos kilómetros, los hombres expolian una naturaleza que ellas adoran en busca de uranio; ‘Tanjuska y los 7 diablos’ cuenta la historia de una niña de 12 años que hace dos dejó de comer, de hablar, de jugar… Su padre, miembro de una comunidad religiosa, atribuye tal cambio a una posesión y no a una enfermedad.

‘Darkenss’, ‘Tragafuegos’, ‘Flame Top’, completan una serie de trabajos de excelente calidad que no hacen más que confirmar el talento y especial sensibilidad de esta narradora que huye de las historias lineales y a quien le apasionan los silencios para que cada espectador salga del cine con su propia versión de la película.

Dentro de la programación de Cuarenta Alcances se proyectarán varios documentales de esta mujer finlandesa.