ASAMBLEA. Algunos de los miembros de la plataforma, antes de reunirse ayer en El Puerto. / V. LÓPEZ
Cultura

Artistas y hosteleros provinciales se alían para potenciar la música en directo

Sostienen que la Ley es «ambigua» sobre las condiciones para acoger este tipo de eventos y se unen para solventar restricciones que «afectan a todos los municipios» Miembros de la nueva plataforma 'Salvemos el directo' se reúnen en El Puerto

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Artistas, hosteleros, asociaciones culturales y aficionados a la música en directo han levantado la voz tras la radical restricción de conciertos que ha sufrido El Puerto de Santa María este verano. Algunos bares pequeños de la localidad se han visto obligados a suspender su programación musical tras sufrir varias intervenciones policiales en los últimos meses mientras celebraban recitales. A través de la plataforma Salvemos el directo (SED) este grupo de ciudadanos sostiene que la Ley es ambigua en lo referente a la celebración de estos eventos en salas de pequeño y mediano aforo, por lo que exigen una ampliación de la normativa- como ha sucedido en Barcelona- o una opción legal que les permita solicitar permisos regularmente.

«La ausencia de regulación mu-nicipal, unida a las ambigüedades del Catálogo Andaluz de Espectáculos ha generado un amplio espacio para la incertidumbre y para la arbitrariedad del poder público», sostienen desde SED. «Hasta ahora, no había legislación alguna que permitiera celebrar conciertos en bares, se hacía sin permiso», explica Melissa, propietaria del Barsito y portavoz.

Por este motivo, «nos gustaría lograr una ampliación de este marco legal, como ha ocurrido en Barcelona, para que se puedan celebrar conciertos en estos lugares en los mismos horarios y al mismo volumen que se ofrece la música grabada», sostiene Javi Ruibal, uno de los muchos músicos que se han sumado a la iniciativa.

Portavoces de SED se han reunido ya en dos ocasiones con representantes del Ayuntamiento portuense para buscar una solución al conflicto, en el que los principales afectados son los propios artistas, para los que su mayor fuente de ingresos son los conciertos.

«Nos reunimos con el concejal de Juventud y el de Cultura y hemos tenido una buena respuesta», afirma Melissa. «Nos han pedido que presentemos una propuesta más concreta y el concejal de Cultura va a reunirse con el alcalde», cuenta esta joven hostelera. «Nuestro objetivo es que no haya distinción entre música grabada y en directo». Así, según la plataforma, «asumimos que puede ser necesario poner límites a la intensidad del volumen de la música o a los horarios de los conciertos, pero no es razonable impedir cualquier actividad musical».

Por el momento, varios pubs como El Barsito, El Loco de la Ribera y Babaloo -algunos de los pocos locales que poseen una programación anual fija de conciertos en El Puerto- se han visto obligados a cancelar todos sus recitales.

Oferta limitada

Esto acarrea «graves consecuencias sociales, económicas y culturales», apuntan desde SED. «Condena a la inactividad y al paro a numerosos músicos profesionales; impide el surgimiento de nuevos artistas que impulsan su carrera desde estas pequeñas salas y desincentiva la inversión de los promotores de la música en directo, contribuyendo a conformar una oferta cultural muy limitada».

Según los miembros de Salvemos el directo, se trata de un problema que afecta a todos los municipios de la provincia. «A las reuniones ha venido gente hasta de Algeciras», defiende Melissa. En la capital, los empresarios también han sufrido restricciones a la hora de celebrar conciertos hasta tal punto que son casi inexistentes los bares que acojan música en directo. Ajo, de la Asociación Cultural La Canela, cuenta que se vio obligada a acometer obras de mejora en su local para cumplir los requisitos de bar musical. «He tenido que insonorizarlo y aún así, todavía hay problemas», reconoce.

«Este es el primer año que puedo tener una programación cerrada, eso sí, sin arriesgar mucho». Según esta hostelera, «las pequeñas empresas lo tienen difícil». En los estatutos de La Canela «se recoge que nuestro objetivo es promover a los jóvenes músicos pero después, te lo ponen bien difícil».

alenador@lavozdigital.es