CALLE PORVERA

mundos nuevos por descubrir

Este invierno he descubierto una nueva afición. Ocurre a veces que una no sabe a dónde acudir para leer cosas nuevas. El circuito comercial no sale de los cuatro de siempre, que están ahí porque se lo merecen que no quiero decir yo lo contrario, de los éxitos fulgurantes de cada momento y de los libros escritos por o sobre famosillos de turno. La música, concretamente un tema de Fede Comín, me dio la pista.

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Dice la canción Llevabas puesto un vestido marrón y un libro de Jorge Amado. Así que me fui a El Laberinto y pregunté por este autor brasileño al dependiente, que se mostró sorprendido por mi interés, al parecer, no demasiado habitual. Gabriela, clavo y canela ha sido mi primera incursión en su mundo literario y lo cierto es que me ha dejado con ganas de conocer más. Así que, desde ahora, cuando compro un libro, procuro que sea de un autor que no conozca. Es mi nueva afición.

Este libro -que es voluminoso, por si a alguien le interesa saberlo- está escrito en 1958 pero como si lo hubieran publicado ayer: luchas políticas y sociales, violencia ancestral en una ciudad de provincias que se abre a la modernidad mientras que el progreso tarda un poco más en llegar a las mentes de sus habitantes. La actitud callada de Gabriela -una inmigrante llegada del interior a la costa- y lo que provoca a su alrededor con su mezcla de inocencia y de picardía alteran costumbres enraizadas en lo más profundo de la tierra. De Jorge Amado me quedan muchos más títulos por leer: Doña Flor y sus dos maridos (libro al que se refería precisamente la canción que me lo descubrió), El país del carnaval, Mar Muerto o Capitanes de la arena. Todo un mundo por descubrir.