La Junta apoya a la plantilla de la Central Lechera Asturiana y sigue el ciclo de reuniones para buscar salidas

El delegado provincial de Empleo en Sevilla, Antonio Rivas, mostró hoy su apoyo a los trabajadores de Central Lechera Asturiana (CLA), afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE) presentado por la Corporación Alimentaria Peñasanta (Capsa), tras una reunión que supone la primera de un ciclo de encuentros de la plantilla de la planta de yogures y postres de Sevilla con distintos miembros de la Administración regional, según informaron fuentes de UGT-Andalucía.

Según indicaron fuentes de UGT-A a Europa Press, Rivas reconoció en el encuentro que la firma se dirigió hace en torno a un mes y medio a la Junta para pedir ayuda para presentar el ERE, "equivocándose de puerta" para pedir ayuda para la extinción de empleos.

Rivas coincidió con la postura sindical para el mantenimiento del empleo y la negativa al cierre de la planta, ante lo que manifestó otorgar "todo el apoyo necesario".

En este sentido, los trabajadores se reunirán mañana de nuevo con Rivas, además de técnicos de la Consejería de Empleo, para estudiar las posibles soluciones al problema. Asimismo, desde el sindicato prevén reunirse con el consejero del ramo, Antonio Fernández, el próximo viernes.

Los trabajadores rechazaron ayer el desarrollo ERE presentado por la empresa la pasada semana y anunciaron que convocaran una huelga indefinida para los lunes, miércoles y viernes a partir de la próxima semana "hasta que se resuelva la situación".

La próxima semana comenzarán una huelga indefinida que se convocará para los lunes, miércoles y viernes, dos horas en horario laboral por día, menos los miércoles que serán cuatro horas.

El expediente afecta a unas 200 personas de la línea de yogures y postres de CLA y sus delegaciones comerciales, situadas en Madrid, Cataluña, Levante y Andalucía, donde se ubican el mayor número de trabajadores.

De este modo, de los alrededor de 160 empleados, casi un centenar corresponde a la planta sevillana; seguida de Málaga. También se verán afectadas las delegaciones de la compañía en Jaén, Huelva, Córdoba y Jerez de la Frontera.

La compañía prevé abandonar la producción en la planta sevillana a mediados de agosto y seguir con la logística hasta diciembre del presente año, cuando cerraría completamente las instalaciones.