María San Gil da la espalda al congreso del PP vasco
María San Gil fue la gran ausente de la primera sesión del XII Congreso del PP vasco, del que hasta ayer era presidenta, y su deserción puso de manifiesto la grave crisis interna a la que tendrá que enfrentarse Antonio Basagoiti, su sucesor.
Actualizado: GuardarTal y como se había adelantado, ni San Gil ni el otrora máximo referente de la formación conservadora, el eurodiputado Jaime Mayor Oreja, se acercaron al Palacio Euskalduna de Bilbao, sede del Congreso. Su portazo hizo estériles los llamamientos a la unidad interna lanzados por el único candidato a la sucesión, Antonio Basagoiti, que arrancará su mandato lastrado por la división y con el reto de suturar la grave fractura interna a pocos meses de la celebración de elecciones autonómicas en Euskadi.
La sombra de San Gil sobrevoló los discursos. El secretario general saliente, Carmelo Barrio, que defendió la gestión de la Ejecutiva ante la ausencia de su líder, glosó emocionado su figura y señaló que San Gil «es lo mejor que hemos tenido en este partido en su historia». En la misma línea, Carlos Iturgaiz, que aceptó que «a algunos» no les gustó cómo expresó su discrepa
ncia con la dirección nacional, calificó a la dirigente ausente como «el diamante más preciado del PP no sólo del País Vasco sino de España» y emplazó a Antonio Basagoiti a «seguir su estela».
