«Lo de que están muertos son suposiciones»

Shlomo Goldwasser quiere mantener la ilusión de que su hijo está vivo, pero cuando se descuida habla de él en pasado. «Udi era un gran fotógrafo», se sonríe, mientras pasea entre las cajas que guardan las miles de instantáneas que el soldado reservista, graduado en Ingeniería Medioambiental, dejó por allí cuando se casó con Karnit, apenas 10 meses antes de la captura. Lo de que está muerto son «suposiciones», ya que nadie tiene pruebas. La familia de Eldad Regev y su propia esposa, Shlomo y Karnit, han desafiado el abatimiento lanzándose al mundo para pedir la liberación. «Podíamos habernos encerrado en una habitación, pero no somos esa clase de gente... los medios son nuestro ejército», repite varias veces el padre, mostrando hoja por hoja dos años de calendarios cuajados de citas para recuperar a Ehud.