Tráfico recurre a una campaña dura e impactante para tratar de reducir las víctimas de motos

La Dirección General de Tráfico (DGT) puso en marcha a partir de ayer jueves una nueva campaña en televisión destinada a concienciar a los motoristas de que la mayoría de los accidentes mortales en las carreteras se deben al exceso de velocidad y a la inexperiencia, así como recordar a los conductores de turismos de que estén alerta ante la posible presencia de los vehículos de dos ruedas debido a su vulnerabilidad.

La dura e impactante campaña, que consiste en dos anuncios de televisión, se enmarca en el Plan de Seguridad Vial para Motos, que tiene como objetivo invertir la tendencia creciente en la evolución del número de muertos y heridos graves por accidentes de motos y ciclomotores.

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Durante el año pasado, 2.741 personas perdieron la vida en accidentes de carretera en todo tipo de vehículos, un 32% menos que en 2003. Pero esta reducción de la siniestralidad no registró la misma tendencia en las motos , sobre todo las de gran cilindrada. Así, en 2003, solo en accidentes de motos murieron 233 personas, mientras que en 2007 se registraron 418 víctimas mortales, un 84% más. En total, en vehículos de dos ruedas murieron 528 personas. Y en lo que va de año, ya han muerto en accidentes de carretera 107 personas que circulaban en motos y 31 en ciclomotores.

Los dos anuncios que se emiten ya en las televisiones versan sobre la circulación en carretera y en el ámbito urbano. En el primero de ellos, el conductor de una motocicleta, desde una silla de ruedas, recuerda con abatimiento su accidente en el que murió su acompañante. El siniestro, según la DGT, responde al tipo que se produce con más frecuencia en vías interurbanas: salidas de la vía por exceso de velocidad, pérdida de control o fallo de cálculo, durante los fines de semana y protagonizados por motoristas de 26 a 46 años, no demasiado expertos, con motos de más de 500 cc y que no llevan más de dos años conduciéndolas.

El segundo trata sobre el conductor de un turismo que colisiona y mata a un motorista. Con un sentimiento de impotencia, rememora el accidente y traslada a los ciudadanos un mensaje de que es necesario un refuerzo de atención y señalización al realizar maniobras como giros, cambios de carril o apertura de puertas, puesto que los vehículos de dos ruedas, por su tamaño, es fácil que queden ocultos en los ángulos muertos.

Con la evidente intención de impresionar y sensibilizar a los telespectadores, y de manera especial a los conductores, el mensaje dirigido a los motoristas se focaliza en que manejar una moto es mucho más complicado y arriesgado que manejar un turismo, como lo demuestra que el riesgo de matarse en un accidente de tráfico en moto es 17 veces superior a matarse en un turismo. También les recuerda que, en carreteras, el exceso de velocidad y la falta de control por inexperiencia pueden resultar mortales, al tiempo que les advierte de que son menos visibles por su tamaño.

A los conductores de vehículos de cuatro ruedas les recuerda también este último aspecto, al tiempo que les pide extremar la precaución y la señalización de maniobras como cambios de carril, giros, aparcamientos y apertura de puertas.