La Junta tiene hasta seis meses para pronunciarse por el caso de las faldas de las clínicas Pascual

Los servicios centrales de la Consejería de Empleo de la Junta en Sevilla tienen hasta seis meses para pronunciarse por el caso de las faldas en las clínicas Pascual, después de haber recibido esta semana las alegaciones de la empresa después de que la Inspección de Trabajo les impusiera una multa de 6.251 euros por entender que había cometido una infracción atentando contra el derecho de igualdad de los trabajadores.

En un documento de 43 folios, la empresa Pascual destaca la «cultura de la igualdad laboral entre hombres y mujeres» que ha existido desde siempre en sus clínicas con «una permanente predisposición a favorecer la integración e inserción de la mujer en el mundo del trabajo».

De este modo aporta los datos de su plantillas, «donde más de un 80% está formada de profesionales que son mujeres, en concreto, de una media total de 1.967 trabajadores, 1.397 son mujeres y sólo 390 hombres».

Señalan en su escrito de alegaciones que «desde siempre, todo el personal femenino de enfermería y auxiliares ha desempeñado su labor, con el uniforme que actualmente visten, del que la bata es un elemento más, nunca cuestionado, nunca rechazado, y nunca causante de ningún tipo de problema o suceso».

En este caso, ponen como ejemplo de «uniforme idéntico», al que se usa en centros hospitalarios de otras comunidades autónomas, «como en Navarra o muy similar al que usan las enfermeras inglesas de los hospitales públicos del National Health Service».

Quince años

En este sentido insisten en «ausencia de incidentes o reclamaciones acerca del uniforme de la empresa, tras más de quince años de utilización». Recuerdan que la visita no se produce «por ninguna denuncia de trabajador afectado, ni tampoco por ningún accidente o situación de riesgo a la salud de los trabajadores», sino por un conflicto «provocado y originado única y exclusivamente por una denuncia a los medios de la presidenta del comité, conflicto que se califica, y así es, en dicha acta, como de gran impacto mediático».

En el escrito la empresa señala que no descarta emprender acciones legales «no sólo contra quienes han iniciado la campaña mediática, sino de quienes se han hecho eco de la misma, desprestigiando y falseando la verdad, atacando injustamente e injuriando a personas y estamentos de nuestros hospitales, con el consiguiente deterioro de la imagen y el prestigio de la empresa». En este sentido, se refiere a «despropósitos de frases y comentarios soeces, algunos rayano en lo pornográfico, la mayoría de los cuáles nos da vergüenza repetir».

Por último, la empresa destaca que desde febrero tiene acordado el plan de Igualdad con los trabajadores.