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Antonio Muñoz destituye a Calderón y Procopio toma el mando del Cádiz

El técnico gaditano cesa en su cargo como entrenador debido a los malos resultados del último mes El preparador del filial es una medida provisional a la espera de fichar a un «revulsivo» para el banquillo

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Era cuestión de tiempo porque «el problema no es perder, sino cómo se pierde», apunta el presidente cadista. Antonio Calderón ya ha dejado de ser entrenador del Cádiz. Pasadas las doce del mediodía, Antonio Muñoz le comunicaba telefónicamente la decisión de la comisión deportiva. Por la tarde, anunciaba la destitución del entrenador gaditano y la llegada al cargo del técnico del filial, Raúl Procopio, que toma las riendas del equipo hasta nuevo aviso.

Ni siquiera se ha esperado a encontrar un sustituto. El golpe de timón había que darlo de inmediato. La deleznable imagen ofrecida en Chapín condenó definitivamente a Calderón y a varios futbolistas que el año que viene tendrán que buscarse otro equipo. El ex preparador deja al conjunto gaditano decimocuarto, cinco puntos por encima del descenso pero con una preocupante dinámica descendente. Procopio dirigirá al primer equipo pero de forma provisional, ya que el club maneja una lista de entrenadores y en breve anunciarán la solución a la crisis. Sergio Kresic, Paco Flores, e incluso Víctor Espárrago (complicado), son las opciones prioritarias en la agenda.

Hasta final de temporada

Hoy podría conocerse su nombre. La intención es firmarlo hasta final de temporada con el objetivo de lograr la salvación. La continuidad tendrá que ganársela en estas últimas diez jornadas, no quieren asegurar su renovación ya que la permanencia no es un reto tan complicado.

El presidente reconocía a este medio que «esta situación no la desea nadie porque no es agradable, y menos cuando le toca a uno de la casa. Pero el momento nos ha obligado. Hay que intentar dar un cambio a esta tendencia, cada vez más negativa, y nuestra obligación es tomar decisiones».

El máximo accionista de la entidad destaca que «Antonio lo ha entendido, como es lógico. A nadie le resulta agradable. Todos creen que están capacitados para salvar el Cádiz, pero pasan las jornadas y no hay reacción».

La manera de perder

Pese a que Antonio Calderón no estaba funcionando como esperaba la comisión deportiva, la intención era que se mantuviera en su cargo hasta final de temporada. «Nunca pensamos en esto. Pero el problema no es perder, sino cómo se pierde. Se puede perder haciendo el mejor partido de la temporada, y además tenemos un buen colchón de puntos, pero la imagen que está dando el equipo no la podemos permitir». Además, «van quedando menos partidos y no queremos correr riesgos».

El fichaje de un nuevo entrenador debe ser «el revulsivo que necesitamos. Es bueno que haya un cambio». Prefiere no opinar sobre los motivos de la actual crisis deportiva. «No soy técnico y es mejor que no dé estas opiniones públicamente».

Calderón tiene dos años más de contrato con el Cádiz. En su contrato existe una cláusula que recoge que si es destituido pasaría a formar parte del organigrama técnico. Como es lógico, el gaditano aún no ha tomado una decisión sobre su futuro. Es posible que descanse hasta final de temporada y luego decida qué hacer. El mismo sábado ya tenía asumido que sus horas en el banquillo gaditano estaban contadas.

La comisión deportiva tiene previsto reunirse hoy para decantarse por un entrenador que logre sacar al equipo adelante.

jaguilera@lavozdigital.es