Familiares de enfermos de Urgencias esperan en las cercanías. / J. G.
JEREZ

El número de camas del Hospital desciende un 3%

«El número de camas del Hospital de Jerez descendió un 3% en los últimos tres años», según informaron la pasada semana los representantes de UGT. Este dato corrobora la necesidad de dotar al centro hospitalario jerezano de más plazas para hospitalización para que, entre otras cosas, se descongestione el servicio de Urgencias. «De las 563 camas que había pasamos a 546 -indicaron- cuando dispusieron habitaciones individuales».

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«Hay pacientes que pasan hasta 50 horas en el área de Observación cuando la sala está habilitada para una estancia de una o dos horas», argumentaron desde la organización sindical. «Allí no está prevista la alimentación y a los enfermos se les aísla de sus familiares, lo que genera en ellos una angustia innecesaria además de tensión en los familiares y, en consecuencia, en los profesionales sanitarios. De ahí hasta llegar a las agresiones», puntualizaron.

La propuesta de UGT «no es hacer un segundo hospital porque no es lógico, sino construir uno nuevo. Debería ser un Hospital universitario con mil camas, que es lo que necesita la ciudad, el doble de las que tenemos ahora», destacaron. «Ahora se está parcheando y va a llegar un momento en el que sea insostenible». Desde el sindicato pusieron como ejemplo el caso de la capital gaditana: «Allí van a hacer un Hospital nuevo, de primer nivel, que nos da mucha envidia y eso que tienen muy cerca el de Puerto Real, al contrario que en Jerez».

«Sevilla, con 700.000 habitantes, tiene alrededor de 4.000 camas, mientras que Jerez, que atiende a un población de más de 300.000 personas tiene 563». Esto significa que en la capital hispalense hay un ratio de una cama por cada 175 habitantes, mientras que en la localidad jerezana este ratio es de una cama por cada 533 ciudadanos. Hay que recordar que además del núcleo principal, el Hospital de Jerez atiende a los habitantes de la Sierra y la Costa Noroeste (Sanlúcar y Chipiona) «con el apoyo solamente de dos centros privados», (uno en la localidad sanluqueña y otro en Villamartín).

Desde UGT van más allá y denuncian que ciertos servicios, como la cocina, «no reúnen estructuralmente las condiciones adecuadas. Hay ciertos puntos en los que no cumple la normativa y no hay sitio para corregirlo».