Luis pide cita con Villar para que le despidan

Cinco días después de lo que se suponía un triunfo balsámico ante Francia en el partido amistoso del pasado miércoles, Luis Aragonés sigue empeñado en que lo mejor es que le echen como seleccionador. Casi como si fuera un periodista, el seleccionador ha cursado a la Federación la petición de una entrevista con Ángel Villar para mirarle a los ojitos y decirle a la cara que la situación es insostenible, que así no se puede llegar a la Eurocopa de Austria y Suiza que se celebra el próximo mes de junio.

El presidente, en cambio, es partidario de dar largas. Cree que el tiempo juega a su favor y permitirá al técnico madrileño reflexionar, reconsiderar su postura, tranquilizarse, seguir con ganas al pie del cañón y ofrecer la lista de convocados para el amistoso que España disputará el próximo 26 de marzo ante Italia, la campeona del mundo, en el Martínez Valero de Elche.

Ayer no se vieron

Ángel María Villar y Luis no hablaron en el regreso en AVE desde Málaga, tampoco intercambiaron opiniones antes del fin de semana en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas y ayer lunes el alto dirigente se encontraba en Maspalomas (Gran Canaria), donde se celebra una convención de árbitros de la UEFA, cuya comisión preside.

Luis, en cambio, sí comenzó la semana en Las Rozas, donde encabezó una cumbre en la que el cuerpo técnico de la FEF y el doctor Jorge Candel se reunieron con los médicos de los clubes de Primera División, del Liverpool y el Arsenal, con vistas a analizar la salud y preparación de los internacionales ante la Eurocopa.

Aunque planifique con sus colaboradores el certamen de Austria y Suiza, se sienta seguro de sus posibilidades y del apoyo de los jugadores, Aragonés sigue anímicamente mal.

Fernando Hierro, el director deportivo, le ratificó en las tripas de La Rosaleda hasta el Europeo, pero el de Hortaleza mantiene su teoría. Se siente un estorbo dentro de la FEF y no está dispuesto a convivir cuatro meses perseguido por la sombra de su sucesor y lo que entiende una campaña en favor de los madridistas Guti y Raúl.