El Cádiz recurrirá la tarjeta que vio Fleurquin en Anoeta

Andrés Fleurquin vio la quinta amarilla el pasado domingo en Anoeta que cierra el ciclo y le obliga a cumplir sanción. A los once minutos de partido, el colegiado Amoedo Chas se echaba la mano al bolsillo y le enseñaba la cartulina por «dejarse caer dentro del área adversaria, simulando ser objeto de falta», tal y como refleja el acta. El uruguayo no acabó nada contento con esta decisión pues entendía que le habían hecho penalti, por lo que pedía al club que recurriese la sanción.

Órdenes recibidas. El capitán manda y el Cádiz obedece. Ayer, los servicios jurídicos de la entidad estudiaban el vídeo del partido contra la Real Sociedad y decidían tomar medidas. El Cádiz recurrirá la cartulina. «Se observa claramente cómo hay contacto, le agarran de la camiseta y por tanto no existe la simulación que recoge el acta», declara Martín José García Marichal.

Un agarrón

El abogado señala que «somos moderadamente optimistas», aunque el Comité puede interpretar «que el agarrón no sea suficiente como para derribar al contrario. Pero el contacto es claro». El último recurso, en el que pidieron la anulación de la tarjeta a Diego Rivas por una mano inexistente, no tuvo éxito.

Por otro lado, Antonio Calderón recuperará a tres hombres importantes para el choque ante el Celta de Vigo. Gustavo López se encuentra en la fase final de su recuperación y esta semana espera realizar todos los entrenamientos con el grupo. Llegará a tiempo. También vuelve Gastón Casas tras sus dos partidos de sanción por la agresión cometida sobre Diego Castro. El técnico cadista deberá elegir entre el argentino y Dani Martín. Por último, Diego Rivas regresa al equipo amarillo después de que no pudiera jugar en San Sebastián por una cláusula que impuso su club de origen. El manchego ya ha superado sus problemas en los abductores.

Quien preocupa es José Julián de la Cuesta. Se resintió de unas molestias en Gijón y dos semanas después sigue con dolores. La lesión que sufrió el año pasado le sigue trayendo problemas. El colombiano trabaja aparte con los fisios y el entrenador no quiere forzarle. Le quedan entre una y dos semanas para una recuperación total y no hay prisas porque la defensa se está mostrando como la línea más solvente.