Cartas

Así va la Sanidad pública

Reclamo el derecho a pertenecer a la Sanidad Pública o no, porque ahora siento que me están robando. «No quiero seguir pagando por un servicio que no recibo». Ayer, por ejemplo, fui al ambulatorio de La Laguna para que atendiesen a mi hija de 8 años con un ojo enormemente hinchado.

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Después de esperar media hora para recibir número por urgencia, el empleado me dijo que hablase directamente con la Dra. Diáñez. 40 minutos más tarde, ella me dijo que tendría que esperar «un poquito». Se lo recordé cuando llevábamos allí una hora y media. La doctora cambió de opinión: tendría que esperar hasta que terminase la consulta y pasaran todos los pacientes.

Indignada y tras dos horas de espera, decidí probar suerte en el hospital Puerta del Mar. Lo recorrí de punta a punta por la desinformación de los empleados, las obras y la escasa señalización: seguí esperando una hora más y tras reclamar mi derecho a atención médica «digna», me dijeron que sólo llevaba allí «¿una hora!», y que debía seguir esperando, ¿dos horas más?

Triste y al borde de un ataque de nervios me fui a mi casa con la impotencia de no haber sido atendida. Está visto que para que te atiendan como una persona, tienes que pagar un seguro privado.

Purificación Cabra. Cádiz