OBITUARIO

Muere «Súper Paco», el anciano corredor malagueño que deslumbró en los 101 kilómetros

Francisco Contreras sufría desde este verano un cáncer de esófago con metástasis que se lo llevó este martes

Francisco Contreras en una de las pruebas que disputó SUR

J.J. Madueño

Su nombre está escrito con letras de oro en memoria de aquellos que corren los 101 kilómetros de la Legión en Ronda. La leyenda cuenta como un anciano superó la prue ba, pese a la dureza, convirtiéndolo en un destacado corredor por los escarpados paisajes de la Serranía de Ronda. A «Súper Paco» le recuerdan con su sombrero de paja, aferrado a sus bastones de madera, hechos con palos buscados en el campo, con el dorsal adherido a una camisa de cuadros, que conjuntaba con unos pantalones y unas botas de trabajo en el campo. Singular, sin licras, camisetas de última generación, ni estrategias de equipo. Sólo con la voluntad de superar las leyes físicas del cuerpo humano y mantener su salud a raya.

Su imagen corriendo una de las pruebas más duras de España le hizo popular. Francisco Contreras , natural del municipio malagueño de Cártama, comenzó a correr a los 60 años, cuando un médico le dijo que tenía que moverse para poder controlar el colesterol . Entonces, decidió echarse a andar y luego a correr. No se le dio mal y probó a hacer carreras de grandes distancias, donde era todo un atractivo por su pintoresca imagen alejada de los actuales «runner».

Lo ha hecho así hasta que este verano le diagnosticaron un cáncer de esófago con metástasis . Murió este pasado martes rodeado de los suyos a los 81 años. La misa para su eterno descaso será es miércoles a las 16.30 horas en la Estación de Cártama.

Le dijeron que estaba loco, que no tenía edad para esos menesteres, pero se impuso a todos sumando hazañas e historias. Comenzó a forjar su leyenda en los montes que rodean a su pueblo, del que llegó a ser pregonero. Su historia deportiva tiene hitos como aquella vez que fue andando 40 kilómetros hasta Antequera para luego hacer una carrera de otros 40 kilómetros.

Los inicios los hizo junto a su hijo, recomendando siempre que, cuando se corre, hay que comer para evitar los desfallecimientos. De este modo, ha aguantado verdaderas pruebas para súper hombres, como la vez que corrió 189 kilómetros en Cerdaña . Aunque no siempre narraba victorias contra su cuerpo. En Suiza contaba que se le soltó el estómago y lo pasó mal en una prueba extrema. Finalmente, ha ganado la carrera de la historia para los aficionados, en los que deja un grato recuerdo de superación, lucha, entrega y constancia. Descanse en Paz.

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