TURISMO
Ruta por cinco maravillosos pueblos de Granada a los que escaparse un fin de semana
Paseo por Montefrío, Trevélez, Salobreña, Alhama de Granada y Guadix
El adjetivo es el maquillaje de la literatura, donde conviene usarlo en su justo término. Si el escritor se excede con el colorante la obra se resiente. Pero la geografía es otra cosa. En la geografía los adjetivos son necesarios porque las montañas son altas y bellas y el mar azul y manso. Al menos en Granada, donde cinco pueblos de cima u orilla ( Trevélez, Salobreña, Montefrío, Alhama de Granada y Guadix ) merecen una visita en cualquier época del año.
Trevélez
Como el asombro forma parte de su equipaje el viajero se dejará sorprender por Trevélez , que lleva adherido el distintivo de calidad de las Alpujarras, caracterizado por sus casas blancas destejadas, sus calles cortas, su peculiar trazado urbanístico y su gastronomía. Pocas pequeñas alegrías hay comparables a la degustar una tapa de jamón en cualquier taberna del barrio bajo.
Ningún sofá tiene buenas vistas, de modo que es recomendable en Semana Santa salir de casa y acercarse a este municipio hermanado con la calma, la cal y la montaña . Para transitar de manera correcta por este enclave alpujarreño es preciso no preguntar la hora ni tener relación con la prisa. Los pasos deben ser lentos y la mirada, larga para divisar el Mulhacén.
El paisaje de proximidad de Trevélez también es magnífico. Entre los parajes que enmarcan a este pueblo situado en la ladera de Sierra Nevada destacan Pico del Rey, Siete Lagunas, Cerro Pelao y la Alcazaba. En cuanto a la belleza interior, la apuntalan la iglesia de San Benito, del siglo XVI, y la ermita de San Antonio, que alberga la imagen de la Virgen de las Nieves .
Los secaderos de jamón son otro atractivo turístico del pueblo. El visitante tiene la oportunidad de visitar el museo del secadero más antiguo de la Alpujarra , conocer el proceso de las plantas de secado y adentrarse en algunas situadas a 1.700 metros de altitud, donde los vientos aportan el nivel justo de frío y humedad para conseguir un secado al dente.
Dónde alojarse : Apartamentos Balcón del cielo
(Calle Carretera) Teléfono: 693 80 51 96
Dónde comer : Restaurante Piedra Ventana
(Carretera Ugíjar, 36) Teléfono: 958 85 85 99
Montefrío
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Hay pueblos que, se miren por donde se miren, desembocan en postal . Montefrío es uno de ellos. Para mimar a los ojos nada mejor que una visita a este municipio enclavado entre las sierras de Parapanda y de Chanzas, cuyo paisaje urbano es comparable al del entorno que lo enmarca, pues en nada desmerecen el castillo árabe y la iglesia cristiana erigidos sobre una peña que corona la villa a la naturaleza que la circunda.
El castillo de la villa, construido en 1352 sobre las ruinas de una fortaleza nazarí, fue utilizado para la defensa del reino de Granada hasta que el 26 de junio de 1486 lo conquistó Fernando , en tanto que su consorte, Isabel , nombró alcaide. Tras la toma , los Reyes Católicos ordenaron construir en él una iglesia, concluida por fases, en la que intervino Diego de Siloé .
La arquitectura religiosa embellece a Montefrío. Lo hacen la espectacular iglesia de la Encarnación , construida durante el reinado de Carlos III , la iglesia del Convento, erigida también en el siglo XVIII, y la antigua iglesia de San Sebastián, de estilo renacentista. Las cruces que jalonan el pueblo también ejercen de atractivo para el visitante.
Como lo ejercen el puente romano, la necrópolis visigoda, la casa de los oficios , la fortaleza árabe, los museos de la Navidad y del olivo, el pósito, y, ya fuera del casco urbano, las Peñas de los Gitanos, un paisaje caracterizado por altos tajos de roca calcárea poblados de encinas en el que se encuentran esparcidos dólmenes y cuevas con rastros de pinturas rupestres.
Dónde alojarse : Nuevo Monteftur
(Calle Alta, 2) Teléfono: 639 33 84 39
Dónde comer : Restaurante El pregonero
(Plaza de España, 3) Teléfono: 958 33 61 17
Salobreña
Que la belleza es blanca lo acredita Salobreña, donde comparte protagonismo con el azul, ese buen color. Entre ambos aportan a este pueblo de la Costa Tropical su impronta de sosiego, apuntalada en unas calles que invitan a pasearlas despacio y en un mar que tranquiliza. De ahí que visitarlo sea una magnífica opción para el descanso en Semana Santa.
Y también para el esfuerzo cuando tiene recompensa. Salobreña es un pueblo de calles empinadas que concluyen en una magnífica fortificación de la que se tienen noticias desde el siglo X. El castillo dispone de tres recintos, uno de ellos el antiguo alcázar nazarí. Los otros dos son una ampliación castellana de finales del siglo XV. Vale la pena subir hasta esta maravilla.
También la vale visitar la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, edificada sobre la mezquita musulmana, el templo, erigido en el siglo XVI, es de estilo mudéjar. Sobresale su puerta lateral, con decorado de azulejería y la torre, esbelta y rematada con almenas escalonadas.
Otro lugar emblemático es la bóveda, un bello pasaje medieval que comunicaba el barrio del Albaycín con el núcleo de la antigua medina, centro de la actividad comercial. También destacan el paseo de las Flores, construido sobre la ladera en que se asentaron los primeros habitantes de la roca, y el mirador de Enrique Morente , un gran balcón, a 98 metros, sobre el tajo, dedicado, en palabras del Ayuntamiento, a la figura de uno de los cantaores de flamenco granadinos más grandes e innovadores.
Dónde alojarse : Hotel Miba
(N-340, Kilómetro 325) Teléfono: 958 61 72 28
Dónde comer : Casa Emilio
(Paseo marítimo, 5) Teléfono: 958 34 94 32.
Alhama de Granada
Los verdaderos pies del viajero son los ojos. Para patearse Alhama de Granada es preciso tenerlos bien abiertos porque todo en este pueblo granadino es bueno para la vista : el laberinto urbanístico de sus calles árabes, los restos de muralla, la torre vigía, el impresionante baño fuerte, el castillo, el puente romano y sus magníficas iglesias.
Geográficamente privilegiado, el pueblo, enclavado en la Sierra de Tejeda y colgado sobre un tajo del río Alhama, debe su fama no solo a su apostura, sino también a sus aguas termales, de cuyas propiedades curativas disfrutaron romanos y árabes . El balneario ofrece tratamientos contra la artritis, el reuma y el estrés.
Aunque el viajero esté sano, debe visitar el baño fuerte, siquiera sea por disfrutar de sus espléndidos arcos de herradura. Y después, o antes, adentrarse en la iglesia mayor de Santa María de la Encarnación, construida a partir del siglo XV, de estructura gótica y cuya torre es el punto de referencia visual de Alhama.
La iglesia del Carmen, la de San Diego, el museo parroquial, la antigua cárcel, la fuente pública caño Wamba, la casa de la inquisición, los baños árabes, las casas solariegas y el monumento natural Tajos de Alhama, que alcanzan una profundidad superior a los 50 metros, son otros de los hallazgos que descubrirá el viajero este en este municipio del poniente granadino.
Dónde alojarse : Hotel El Amparo
(Cortijo de Lorenzo, sin número) Teléfono: 657 23 11 84
Dónde comer : Bar el Tigre
(Paseo de la Constitución, 1) Teléfono: 958 35 04 45
Guadix
Los años sientan bien a Guadix, uno de los asentamientos humanos más antiguos de España. en esta ciudad granadina la prehistoria persiste adaptada en las casas-cuevas, en tanto que la época musulmana lo hace en la alcazaba y la cristiana en magníficos monumentos como la Catedral y las iglesias de Santa Ana, Santo Domingo y San Francisco . Luego, hay que visitarla.
Aunque la fisonomía urbanística prevalente es la árabe, una seña de identidad de Guadix es la existencia de barrios con viviendas cuevas. En uno de ellos se encuentra la Ermita Nueva , donde se ubican la cueva del adre Poveda y la de artes y costumbres populares. Próximo a ellas se alza el mirador de la Magdalena .
En Guadix hay que visitar sí o sí la Catedral cuya construcción se extiende por dos siglos (del XVI al XVIII), por lo que, construida sobre una mezquita, se funden en ella los estilos gótico, renacentista y barroco . En su museo, situado en la antigua sala capitular, destaca un ejemplar de la Biblia de San Jerónimo , editada en 1515, así como piezas de orfebrería y libros corales.
La alcazaba , construida en el siglo XI, desde la que se divisa por un lado la vega y por otro Sierra Nevada, es otro de los monumentos clave de Guadix, que en su catálogo de arquitectura cum laude cuenta también con el palacio de Peñaflor , sobre cuyo patio central se yergue una magnífica balconada, así como con el Seminario Menor y la Iglesia de san Agustín .
Senderos de Granada
Circular Lanjarón
Este sendero circular comienza junto al área recreativa parque del Salao, junto a los carteles de ubicación e informativos que se encuentran instalados a la entrada del pueblo de Lanjarón, al que se retorna después de recorrer 12,4 kilómetros de terreno de media montaña en alrededor de 5 horas.
Acequia de Toril y Dómenes de Alicún
El patronato provincial de turismo de Granada define esta ruta como corta y sencilla y añade que permite contemplar los dólmenes situados junto al Balneario de Alicún de las Torres y la espectacular y extraña pared mineral que ha formado una acequia de aguas termales a través de los siglos. Los 2 kilómetros de recorrido se transitan en una hora.
Barranco de la Fonfría y Pino de la Señora
El parque natural de la Sierra de Baza ofrece un recorrido por el arroyo de Baúl que permite contemplar uno de los mayores ejemplares de pino laricio de la provincia de Granada. En concreto, el de la Señora, tiene más de 6 metros de altura y 300 años de vida . La ruta, de 22 kilómetros, se realiza en siete horas y media.
Camino mozárabe de Santiago
El itinerario transcurre entre la alta montaña de Sierra Nevada y las zonas áridas de Guadix hasta terminar en Granada, a la que se llega desde la frondosidad del valle río Aguas Blancas. Este Camino, ocupado por el hombre desde la prehistoria, conserva un patrimonio cultural diverso y una completa oferta de servicios, según especifica el patronato de turismo.
Circular de la Atalaya (Padre Ferrer)
La Sierra de El Manar, en Padul, cuenta con numerosos miradores desde los que se divisa Sierra Nevada y el Valle de Lecrín. Uno de ellos es la Cruz de La Atalaya, un balcón sobre el municipio y su entorno. La ruta, que recorre el sendero PR-A-376, lleva el nombre del padre Manuel Ferrer Muñoz , nacido en Padul, un sacerdote jesuita, naturalista y montañero. Los 9,3 kilometros de la ruta se transitan en cuatro horas y cuarto.
