20 ANIVERSARIO ABC CÓRDOBA

20 noticias de Córdoba | Gómez, de Malaya a prisión por el fisco

El empresario sigue cumpliendo su condena por fraude millonario a Hacienda en tercer grado y con una pulsera telemática

Imagen del juicio que se celebró contra Rafael Gómez en la Audiencia Provincial de Córdoba en 2017 VALERIO MERINO

Pilar García-Baquero

Rafael Gómez «Sandokan» cumple hoy en tercer grado penitenciario la condena por defraudar 28 millones de euros a Hacienda con una pulsera telemática desde su domicilio. Este juicio arrancó en enero de 2017 como «el enjuiciamiento por un delito fiscal más importante de la historia de Córdoba ».

El Juzgado de lo Penal 3 de Córdoba lo condenaba a cinco años y tres meses de prisión y al pago de una multa de cerca de 112 millones de euros, -que no ha satisfecho aún- como autor de dos delitos contra la Hacienda Pública por el impago de más de 28 millones hasta el año 2006. Para hacer frente a esa cuantía millonaria ofreció una serie de «pagos regulares» y decidió su pensión para su abono. Para obtener el tercer grado , su defensa aludía a que «no existe ningún tipo de riesgo de reincidencia delictiva, toda vez que, por su jubilación, ha abandonado todo tipo de actividad empresarial ». Era el ocaso profesional de un magnate local del ladrillo y la joyería . Este caso le llevó directamente a prisión donde pasó poco más de 15 meses, en medio de numerosos recursos solicitando su puesta en libertad por su edad, por enfermedades o cuidados a sus familiares. Pero no fue su única causa judicial.

Su imperio inmobiliario con Arenal 2000 como buque insignia comenzó a tambalearse con el caso «Malaya» . Su primer paseíllo judicial conocido fue el que protagonizó por este caso de relativo a la mayor trama de corrupción municipal de España, localizada en el Ayuntamiento de Marbella. Salió fortalecido de él. La Fiscalía le demandaba 18 meses de prisión y 1,2 millones por cohecho. La sentencia judicial dio por probado que el industrial y expolítico entregó 300.000 euros en el año 2004 a Juan Antonio Roca (exasesor urbanístico del Ayuntamiento de Marbella y considerado el cerebro de la trama) para que le hiciese la vista gorda y conseguir , así, una salida a una calle noble de la citada localidad para sus oficinas. Fue condenado en octubre de 2013 por este último delito, pero todo se quedó en una modesta multa y 150.000 euros.

Previamente, más indemne aún salió en mayo de 2014 cuando fue absuelto de un delito de desobediencia grave a la autoridad -por no atender requerimientos del juzgado-. Su yerno, asumió la responsabilidad y fue condenado a 9 meses. Pero habría más líos judiciales como la construcción de las naves ilegales de Colecor que merece otro capítulo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación