CÓRDOBA CF

Córdoba CF | Baréin, un pequeño país de aspiraciones liberales con el deporte como embajador

Con la mitad de la extensión de la capital, el Reino se debate entre la apertura y cierto conservadurismo

Campeonato de Fórmula 1 en el circuito de Baréin EFE
Luis Miranda

Esta funcionalidad es sólo para registrados

No hay muchos en Córdoba que sean capaces de encontrar en un mapa el Reino de Baréin , pero casi toda la ciudad está ya familiarizada con el nombre de este pequeño país del Golfo Pérsico . De allí viene el dinero que ha servido para salvar de la desaparición al Córdoba CF gracias al fondo Infinity Capital WL y muchos se hacen preguntas sobre este país y albergan no pocas dudas sobre su régimen político , respeto a los derechos humanos y concepción de la religión .

De allí tienen que venir dos consejeros del «nuevo» club, pero allí se escribió también una página dorada de la historia reciente de Córdoba: en el país se celebró la reunión de la Unesco en que se declaró Patrimonio de la Humanidad al conjunto arqueológico de Medina Azahara .

Baréin es un país muy pequeño, con apenas 760 kilómetros cuadrados , poco más de la mitad del término municipal de Córdoba , que tiene 1.250. Eso sí, su densidad de población es alta y hay censados 1,2 millones de habitantes . Se trata de un archipiélago situado al este de Arabía Saudita, en el Golfo Pérsico, cuya mayor isla, llamada también Baréin, tiene 55 kilómetros de largo por 18 de ancho. Casi un tercio de la población viene de fuera, lo que garantiza una cierta apertura y evita la endogamia.

Hamd bin Isa al Jalifa, que subió al trono de Baréin en 1999 ABC

Los historiadores creen que allí estuvo la civilización Dilmún en la Edad Antigua , y a partir de la islamización, en el siglo IX, pasó a depender de distintos imperios, primero asiáticos y más tarde europeos, como Portugal y Gran Bretaña . En 1861 quedó bajo el Protectorado Británico para evitar una invasión persa, y en 1971 consiguió la independencia. De su patrimonio han quedado algunas de las mezquitas más antiguas del mundo.

Entonces era un emirato, pero la situación cambió a partir de 2011, cuando allí llegó la llamada «Primavera Árabe» . La Policía atacó a los manifestantes que dormían en una plaza de Manama, la capital del país, para reclamar reformas y democracia, y hubo denuncias de torturas y violaciones de los derechos humanos. Era algo que se arrastraba en un país donde se hablaba de detenciones arbitrarias y destierros, a veces por motivos políticos, según informes de Amnistía Internacional.

Desde el año siguiente, 2012, Baréin tiene una nueva constitución en que se define al país como una monarquía parlamentaria , pero la situación sigue sin ser óptima. Las mujeres tienen reconocidos todos los derechos e incluso pueden participar en política, pero todavía es algo minoritario. Tiene un Parlamento con dos cámaras: una nombrada directamente por el rey y otra por sufragio universal.

Protestas con banderas de Baréin en Manama durante la Primavera Árabe, en 2011 AP

Hamad bin Isa al Jalifa , nacido en 1950, subió al trono en 1999 tras la muerte de su padre, primero como emir y en 2002 como rey. De formación en Gran Bretaña y Estados Unidos, es padre de once hijos de cuatro matrimonios , lo que ha generado una corte numerosa y con luchas por el poder, según los analistas. Sin embargo, también el primer ministro , desde 1970, es miembro de la Familia Real: Jalifa bin Salman a jalifa. Algunos comentarias lo tachan de demasiado conservador y de imponer un criterio más rígido.

Baréin tiene un alto índice de desarrollo humano y es considerado por el Banco Mundial como una economía con altos ingresos. El país es miembro de la Naciones Unidas, de la Organización Mundial del Comercio, de la Liga Árabe, del Movimiento de Países No Alineados y de la Organización para la Cooperación Islámica, además de ser miembro fundador del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo. En 2001, el Gobierno estadounidense de George W. Bush designó a Baréin como un aliado importante extra-OTAN.​

La economía de Baréin está basada fundamentalmente en el petróleo. En 1932 se descubrió petróleo en Baréin, el primer hallazgo de este tipo en el golfo Pérsico y fuente de gran riqueza, aunque desde finales del siglo XX el país ha tratado de diversificar su economía invirtiendo en el sector bancario y turístico para evitar depender en demasía de su crudo. La capital del país es sede de numerosas instituciones financieras como el Bahrain World Trade Center y el Bahrain Financial Harbour.

El deporte como escaparate

No obstante, existen importantes reservas de gas natural (180.000 millones de m³) y otro tipo de actividades industriales: refinería de petróleo de 12 m de capacidad que procesa petróleo de Sudán; fundición de aluminio (120.000 t/año) que importa el mineral de bauxita de ultramar, y fábricas de cemento. A pesar de todo esto la renta media es la más baja de todos los pequeños estados petroleros del golfo Pérsico .

El deporte es muy importante en Baréin, que ha saltado a primera plana mundial en más de una ocasión, y que se ha utilizado como escaparate. Desde 2004, el campeonato de Fórmula 1 de automovilismo tiene un Gran Premio de Baréin en un moderno circuito de 6,3 kilómetros , que desde 2014 se hace en horas nocturnas. Una fuerte inversión de 150 millones de euros lo consiguió.

Un premio del rey optó a presidir la FIFA hace pocos años, pero no lo consiguió

Un primo del rey, Sherik Salman , fue candidato a presidir la FIFA , pero no lo consiguió. El país tiene liga de fútbol, pero su selección nunca ha logrado participar en un Mundial. En sus nueve participaciones en Juegos Olímpicos apenas ha cosechado dos medallas de oro y una de plata.

Aunque está más cerca de Arabia Saudí y recela de la voluntad de Irán de aboserberlo, los expertos creen que la cultura de Baréin está más próxima a Persia. El Islam es la religión mayoritaria, pero no se aplica de una forma demasiado rigorista, las costumbres son liberales y es posible el consumo de alcohol, prohibido en muchos países del entorno. Hay además un 9 por ciento de población cristiana y significativa presencia judía, e incluso personas de esta religión han sido embajadores, algo insólito en países árabes.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación