poster Vídeo
CRONOLOGÍA

«Need for Speed»: 20 años de carreras callejeras

La popular saga de coches ha venido 150 millones de copias

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Con la tecnología de la que se disponía por aquellos entonces, en 1994 irrumpió en la extinta 3DO y, luego, en PlayStation y Sega Saturn uno de esos videojuegos que marcarían una época y que, aún, sigue ofreciendo grandes momentos con una propuesta, su última entrega «Need for Speed: Rivals» [ reseña], que explora el mundo abierto.

Pero la historia del juego, que cumple 20 años y que ha llegado a vender hasta la fecha la nada despreciable cifra de 150 millones de copias, tuvo un primer momento. Sencillo pero adictivo, la mecánica consistía en progresar para ir desbloqueando nuevos coches y circuitos. En esa primera entrega ya aparecían las persecuciones de coches de la policía para evitar estas carreras ilegales y que ha acompañado a toda la saga hasta la actualidad.

Esa seña de identidad ha llegado a explorar incluso la otra parte, como propuso «Need for speed: Rivals», en donde el jugador tiene la opción de ponerse en la piel de un policía que defiende la ley y el orden. Este juego supuso la auténtica inspiración de la saga cinematográfica «A todo gas» (Fast & Furious).

Por supuesto, si el jugador de este título popularizado por Electronic Arts caía en las redes de un agente de policía, su progreso se cortaba y perdía con todas las le la ley, nunca mejor dicho. El reto desde el primer momento fue adaptar las sensaciones de la simulación en las máquinas arcade. «Lo más real posible», fue el propósito.

Hasta 1997 no llegó una segunda y mejorada entrega. «Need for speed II» introdujo nuevos modelos de coches, entre ellos, algunos radicales como el Ford Indigo, un concepto futurista que tuvo poca acogida en el mercado. A un catálogo más amplio se le sumaron nuevos y exóticos circuitos como Asia o Australia. Una de las novedades fue la aparición de una modalidad por la que si el jugador acababa el último, automáticamente quedaba descalificado. Con ello se procuraba una mayor rivalidad y competitividad para quedar el primero y, claro está, llevarse el gato al agua en alguna de la carreras que, por si fuera poco, se remodelaron para mejorar en intensidad y tamaño.

Conocido como «Hot Pursuit», la tercera entrega de la saga, que exploraba una mayor sencillez en su manejo, se lanzó un año después y se puso en marcha la opción de correr como policía y aparecían coches de alta gama como el Lamborghini Diablo, una delicia en cualquier caso. Aparecían incluso helicópteros y la posibilidad de «tunear» -personalizar- tu coche.

A la opción de «sobrevivir o morir», la cuarta entrega, titulada «Need for Speed: Road Challenge», se mejoró la inteligencia artificial, con lo cual la conducción de la máquina se perfeccionaba y se buscaba un mayor realismo. Incorporó mejores gráficos tridimensionales y, otra de las características, fue que los coches, cuando se dañaban, perdían eficacia y se reducían opciones de ganar. También había una recompensa por la cual el jugador podía ganar el coche del perdedor.

Desembarcó en el 2000 «Need for Speed V: Porsche» con gráficos mejorados y más definidos. En esta ocasión, se especializó en la conocida marca alemana de vehículos deportivos de alta gama y se amplía el realismo del que hace gala la saga. «Need for Speed: Motorcity Online» (2001) se mejoraba la parte «online» del juego. En esta entrega se ofrecía un catálogo de coches clásicos de alta potencia hasta los años setenta, un experimento que no funcionó (ni siquiera se vendió en algunos mercados europeos).

Tras un periplo marcado por la crisis de la saga apareció «Need for Speed: Hot Pursuit 2», en el año 2002 y supuso un importante salto de calidad en cuanto a los gráficos, mejor definidos. El título, compuesto de 64 pruebas, estaba disponible para las plataformas PlayStation 2, Xbox, PC y GameCube y supuso el debut de EA Black Box, aunque se daba un poco de lado al hecho de que si el coche sufría daños implicaba una reducción de su eficacia, así como fue criticado por la facilidad de ser detenido por parte de la policía

Sexta entrega y nueva evolución. «Need for Speed: Underground», lanzado en 2003 -vendió unos seis millones de copias-, se exploraba en la historia y se ofrecía una trama concreta (con personajes), al margen de lo ofrecido en anteriores entregas. El jugador contaba con un garaje de donde servirse de sus vehículos, principalmente compuestos por un amplio catálogo de marcas de toda índole. Tenía una parte de mayor agresividad, por la cual se puntuaban los derrapes.

Similar al anterior fue la siguiente parte, que llegó un año después. Las carreras callejeras volvieron a plantar cara a sus rivales y, en un gesto brillante, se ampliaron las zonas de juego, el juego era más libre, más personalizable y buscar nuevos retos. La cita anual llegó con «Need for Speed: Underground Rivals», en 2005, que tuvo versión para la PlayStation Portable y con «Need for Speed: Most Wanted» desembarcó en la por entonces nueva Xbox 360. Contaba con hasta ocho modos de juego y se desarrolla en cuatro zonas distintas. Una de las novedades fue la introducción de cambios climatológicos y se podía derribar diferentes construcciones.

Con «Need for Speed: Carbono» (2006) - el primero en llegar a la PlayStation 3- se permitía las carreras de noche y ofrece una mayor colaboración. Por supuesto, este lanzamiento vino aparejado una gran evolución en cuanto al motor gráfico, que ya daba unas imágenes muy realistas de los vehículos. Luego de este título apareció «Need for Speed: ProStreet» (2007), que reflejaba los daños totales de las máquinas, en un alarde por dotar de mayor realismo al asunto. El juego comenzaba cuanto el personaje de Ryan Copper, excorresdor de carreras ilegales, accede a un nuevo reto de competición.

La decimosegunda entrega llevó por título «Undercover». Se presentó en 2008 y exploraba la ciudad de Tri City, que presenta al personaje como un policía encubierto quien se infiltra en una red de contrabando de coches. Llegaron luego «Shift» (2009), que se centró menos en el estilo arcade, el nuevo «Hot Pursuit» (2010), «Shift 2» (2011), «The Run» [ Reseña] (2011) en la que se contó hasta con la modelo Irina Shayk y una remodelada versión de «Most Wanted» (2012) [ Reseña], hasta llegar al actual «Need for Speed: Rivals» (2013), en el que se intensifica el modo multijugador. La próxima entrega podría caer ya el próximo año. ¿Qué nos traerá de nuevo?

Ver los comentarios