Familiares de Albarrán con el alcalde Toscano
Familiares de Albarrán con el alcalde Toscano - L. M.
Dos Hermanas

El campo de fútbol de La Motilla, unido para siempre a su vecino Andrés Albarrán

Las instalaciones deportivas acaban de ser rebautizadas con su nombre, en un emotivo acto al que acudió el alcalde Toscano

Dos Hermanas Actualizado: Guardar
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Las instalaciones del campo de fútbol de La Motilla, en Dos Hermanas, estarán desde ahora unidas para siempre al que fuera uno de sus principales promotores, el difunto Andrés Albarrán Porras, un vecino de esta urbanización nazarena, fallecido en 2011, que estuvo siempre muy vinculado a todas las actividades y proyectos de su barrio. Por esta razón, el alcalde Francisco Toscano, acompañado por la viuda de Albarrán, descubría este pasado jueves el azulejo conmemorativo con el que se rebautizan estas instalaciones con el nombre de este destacado vecino.

La decisión ya fue aprobada por el Pleno del Ayuntamiento nazareno el pasado mes de septiembre pero ha sido ahora cuando se ha oficializado al completo con el descubrimiento de este azulejo en un emotivo y sencillo acto, al que acudieron familiares y allegados de Albarrán, miembros del club y de la delegación de Deportes, entre ellos el concejal delegado Francisco Toscano Rodero, así como los propios menores del club de fútbol que cada tarde entrenan en estas instalaciones.

Muy emocionado, el alcalde quiso destacar la figura de Albarrán y su contribución por la mejora de La Motilla, barrio en el que el propio Toscano residió durante muchos años. «Para mí este es un momento muy entrañable, no puedo evitar muchísimos recuerdos», aseguró el regidor nazareno al recordar que tanto Andrés como otros de este barrio lucharon por levantar unas instalaciones deportivas «que sirvieran para unir a los vecinos y a los hijos de esos vecinos».

En este sentido, Toscano reconoció que vivió «muy de cerca» todo el proceso de construcción de este campo de fútbol no solo por ser el alcalde sino también por residir en este barrio en aquel entonces y por el vínculo de amistad que le unía a Andrés y al resto de personas que lo promovieron. «Fue una persona que lo dio todo en vida por la chavalería de este barrio», reconoció el primer edil en referencia al homenajeado antes de dirigirse, casi con la voz entrecortada, a los menores de los equipos de fútbol base para pedirles que tuvieran siempre presente que «esto existe porque hubo un hombre bueno, gracias al cual fue posible».

Andrés Albarrán se instaló en el barrio de La Motilla en 1982 y desde entonces estuvo siempre vinculado al movimiento vecinal de esta comunidad. Formó parte del consejo escolar del primer colegio público que tuvo esta urbanización y fundó la asociación de padres de alumnos, entre otras tareas, como su colaboración activa en la construcción de la antigua y la nueva parroquia de esta zona.

Su papel más destacado estuvo siempre en torno al deporte. En 1994, junto con otros cuatro vecinos más, fundó la asociación deportiva La Motilla F.C., entidad sin ánimo de lucro a la que dedicó altruistamente gran parte de su tiempo, colaborando a su crecimiento en el plano social, de infraestructuras y deportivo. Además, colaboró también con el Ayuntamiento de Dos Hermanas para la creación del centro social La Motilla, formando parte de la junta rectora y de las posteriores juntas directivas del mismo.

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