El PP gobernará en minoría en el Ayuntamiento de Guadalajara

Tras una jornada de infarto previa a la investidura, finalmente el día de la constitución del gobierno municipal de Guadalajara se han cumplido las expectativas: el PP gobernará en minoría tras la abstención de Ciudadanos. Antonio Román afronta su tercera legislatura al frente del Ayuntamiento aunque esta vez sin mayoría absoluta, lo que le ha forzado a pactar con el grupo encabezado por Alejandro Ruiz, que, entre otros requisitos, ha pedido encabezar una nueva comisión de transparencia, la presencia de todos los grupos con representación en el pleno (con voz, pero sin voto) en la Junta de Gobierno y una subcomisión para los bomberos y los policías locales.

El acto de investidura se ha desarrollado sin sorpresas, salvo alguna anécdota puntual, como la jura del cargo de la concejal electa más joven, Lucía de Luz (PSOE), que ha leído el juramento del alcalde al cargo en vez del correspondiente a la concejal, aunque rápidamente ha corregido el error.

Tras la toma de posesión de todos los concejales (los ediles del PP y de Ciudadanos han jurado el cargo, mientras que algunos en el PSOE y los concejales de Ahora Guadalajara lo han prometido y han afirmando que actuarán según sus valores y principios republicanos), se ha procedido a las votaciones, que han coincidido con los resultados electorales: once apoyos a Antonio Román, ocho a Daniel Jiménez, cuatro a José Morales y dos abstenciones.

Por ello, y sin ningún candidato que haya obtenido la mayoría absoluta, se ha proclamado como alcalde a Antonio Román, que gobernará en minoría. Esto significa que se podrían aliar las demás fuerzas políticas para forzar una moción de censura y relevar del cargo al candidato del PP antes de que finalicen los cuatro años de legislatura.

Los discursos

Después de este acto y del juramento del alcalde, ha intervenido el cabeza de Ciudadanos en Guadalajara, Alejandro Ruiz, que ha subrayado lo «intenso» de los días anteriores en los que su partido ha sido la clave del gobierno (PSOE buscaba un pacto a tres con Ahora Guadalajara para no permitir que Román se proclamase alcalde), aunque ha augurado una «legislatura de pluralidad y diálogo». También ha hecho alusión a las personas que se han podido sentir «molestas» por la decisión de su abstención, pero ha remitido al «diálogo» para solucionar los problemas de la calle. De hecho, Ruiz se ha encontrado con gritos y abucheos a su salida, recriminándole el pacto con Román.

Por su parte, el cabeza de Ahora Guadalajara, José Morales, ha reiterado su compromiso con la ciudadanía para «hacer y votar lo que nos diga la calle», y ha criticado el acuerdo entre PP y Ciudadanos que le ha dado la Alcaldía a Román. Ya en la ceremonia ha pedido la rehabilitación del Fuerte de San Francisco y del poblado de Villaflores con empleo directo, así como la adecuación del servicio de autobuses y que los consejos de barrio tengan voz en las actuaciones que se produzcan en su zona.

El candidato del PSOE, Daniel Jiménez, ha protagonizado el momento más emocionante al agradecer a las familias de los concejales su apoyo, momento en el que se le ha quebrado la voz. Ha citado a Cervantes diciendo que «los defectos más peligrosos son la soberbia y el rencor», aunque también ha asegurado que seguirá en la oposión «porque hay mucho que hacer». También ha resaltado su dedicación exclusiva a la política y ha recordado sus «caballos de batalla» de la pasada legislatura: las ferias de artesanía y del libro, los autobuses y la situación de los bomberos.

La segunda en la lista del PP, Ana Guarinos, ha sido la encargada de dar el discurso de su bancada, donde se ha referido a Antonio Román como «mi amigo», alabando sus dos legislaturas al frente del Ayuntamiento alcarreño. También ha hecho referencia a la candidata del PP a la Presidencia de Castilla-La Mancha, María Dolores Cospedal, presente en el acto. «La ciudadanía ha pedido el diálogo, pero tampoco valen la utopía y la demagogia a la hora de afrontar el gobierno».

Antonio Román ha cerrado la ronda de discursos agradeciendo el voto y la confianza de sus electores y de Ciudadanos, además de resaltar la «responsabilidad grata y ardua» de desempeñar el papel de alcalde. «Estoy feliz como espero que estén los ciudadanos que me votaron», ha afirmado el ya alcalde, que ha prometido cumplir su programa y respetar el pacto con Ciudadanos. Ha recordado a los alcaldes que duraron tres legislaturas en su cargo (Irízar y Bris), así como aquellos que tuvieron que gobernar en minoría (Irízar, Calvo y Bris) y ha reclamado la modificación de la ley electoral para que el partido más votado pueda «gobernar con holgura y estabilidad» y constituir un equipo fuerte. Ha prometido seguir trabajando para que no haya desempleados en la capital, seguir potenciando el deporte y la modernización de la ciudad, ha anunciado una rebaja en el impuesto de basuras y su lucha por los más desfavorecidos. También ha prometido luchar contra la corrupción, hecho que ha criticado.

Ahora se abre un futuro más incierto que tras la anterior investidura, en la que el PP consiguió la mayoría absoluta con 16 concejales. El pleno cambiará de tres a cuatro colores, con dos nuevos: Ciudadanos (que se estrena) y Ahora Guadalajara (que aglutinará a Izquierda Unida junto con Equo y formaciones independientes).