27 aniversario del expolio de Rumasa

¡De vergüenza!, de indignación, de incoherencia, aquellos políticos que aún sabiendo el enorme daño que le hicieron al ilustre empresario jerezano aquel 23F de 1.983, son por lo que un año más y van...27, hay que hablar de la injusticia de Rumasa.

Hace ya 27 años y Rumasa, sin juzgar. Si recordamos el popular verso que dice: ¡Ya no se cuenta por meses, por años hay que contar!. Una injusticia tan grande ya no se puede aguantar. Una noche por Decreto nos entraron a robar. Y desde entonces a hoy...¡Cuánto ha habido que luchar!.

Claro que, lo mejor sería no tener que hablar más, no gritar, callar, perdonar, olvidar; esa sería la manera más natural de ser, pero...es imposible el silencio y éste solo puede venir de la Justicia, del acuerdo, la decisión del arreglo, el reconocimiento público, pero no del pueblo, ni de los medios de comunicación que lo reconocen, sino de aquellos a quién corresponde.

Rumasa, mis queridos lectores, sigue siendo asignatura pendiente del Gobierno y, por tanto el Sr. Ruiz-Mateos, no quiere, ni puede, ni debe, permanecer en silencio y la lucha continúa.

La familia Ruiz-Mateos sigue a la espera de que la Justicia actúe de una vez por todas. Hace ya trece años que D. José María fue absuelto por la Audiencia Nacional por no haber cometido delito; ni haber hecho daños a terceros, después de celebrado aquel, tan publicado y mal llamado juicio de Rumasa, porque no era el juicio de verdad, que investigara y aclarara los motivos, las causas y las razones por las cuales fue expoliado el holding Rumasa, destruido y dilapidado; fue absuelto por la sentencia unánime de los magistrados que formaban el Alto Tribunal, y así lo asumió también el fiscal de la causa, pero...el Sr. Ruiz-Mateos sigue procesado y con los muebles embargados. ¡De vergüenza!

Hace ya 27 años y no le han devuelto nada del inmenso patrimonio del holding Rumasa. Más de 200 sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Madrid a favor del Sr. Ruiz-Mateos y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó al Estado español por haber pisoteado derechos inalienables de los accionistas de Rumasa. No hay que olvidar, que cuando una sentencia no se ejecuta, el deterioro recae sobre la Justicia, y no sobre el damnificado. Me pregunto: ¿A qué espera el Gobierno para enmendar el error?. Porque... aquello fue un error y no corregirlo es perseverar en el error.

Se va a cumplir 27 años del expolio de Rumasa y sin embargo la Nueva Rumasa es especialista en multiplicar empleo. Son muchos los ciudadanos que han depositado la confianza en Nueva Rumasa y ésta, seguro que no les falla. D. José María, está harto de decir que, no sabrá colgar un cuadro, pero le ponen empresas en crisis y... le da la vuelta. En fin, termino con los versos de: Ya no contamos por meses, por años hay que contar. Hace ya 27 años y Rumasa, sin juzgar.