Detenido un militar por grabar durante seis años a niños desnudos con cámaras ocultas en su propia casa

Agentes de Policía Nacional han detenido en Madrid a un hombre de 37 años acusado de llevar seis años grabando a niños desnudos con cámaras ocultas en los baños su propia casa y en la de familiares y amigos a los que también filmaba en situaciones íntimas.

Se da la circunstancia de que el arrestado es cabo primero del Ejército relacionado con la ciberdefensa, por lo que tiene conocimientos informáticos. Fue su propia mujer la que le denunció cuando se percató de lo que estaba haciendo. Se le acusa de la captación subrepticia de imágenes y vídeos de menores, familiares y amigos desnudos, entre los que se encuentran niños de entre 1 y 12 años.

Su modus operandi era el siguiente: ocultaba de forma estratégica los dispositivos móviles en los lavabos del domicilio conyugal y en las viviendas de otros allegados, con el objeto de obtener las filmaciones.

Cuando regresaba, las retiraba, volcaba las imágenes y volvía a poner las cámaras.

Las grabaciones no las difudía, las visionaba él. A pesar de que había borrado muchas, gracias al análisis del contenido de sus equipos informáticos, la Policía consiguió recuperar un importante número de ellas, así como las recientes.

Él mismo aparecía colocando las cámaras

Una vez examinadas las filmaciones, los agentes averiguaron que el sospechoso llevaba realizando estos actos ilegales desde seis años atrás. También corroboraron su participación en los hechos, ya que en las grabaciones aparecía él mismo colocando y retirando los dispositivos.

Debido a la gravedad de los hechos y con objeto de evitar la continuidad de la actividad delictiva, los agentes registraron su vivienda, donde recopilaron un importante número de vídeos.

Además se intervinieron doce discos duros internos, externos y multimedia, nueve dispositivos de almacenamiento USB, dos tarjetas SD, tres ordenadores portátiles, seis teléfonos móviles y dos tablets. Al detenido se le imputa un delito de descubrimiento y revelación de secretos y un delito de corrupción de menores.

Por el momento los investigadores continúan con las labores de análisis del abundante material intervenido para descartar la detección de nuevas evidencias de carácter delictivo. La operación se ha llevado a cabo por agentes de la Unidad de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de Policía Judicial.