¿Qué hacemos con Martínez?

La única certeza es que en la crisis del PSdeG de Lugo nadie permanece indiferente. Incluso la alcaldesa de Sarria, Pilar López, ya ha tenido tiempo en ocho meses de militancia en la organización socialista de metabolizar las «intrigas» constantes en el primer partido de la oposición en Galicia. Casualmente, y junto a la imputación del secretario general, el foco de la noticia se sitúa en la montaña lucense, no demasiado lejos de su localidad. López, una advenediza por llevar poco tiempo, se pregunta:«¿A mí por qué nadie me dijo que la política era esto?». Pero al margen de las decepciones derivadas de los golpes de realidad repentinos, la regidora socialista asegura a ABC: «Con Martínez no deberíamos llegar a este extremo, porque la cuestión es que hay muchos culpables, no toda la culpa la tiene él»

. Y sin titubear se remonta al origen:«El partido se equivocó, cuando salió el tema de Orozco, fallaron los planes y Lara Méndez tuvo que quedarse en el ayuntamiento de Lugo» Yprosigue su relato:«Yo lo que me pregunto es si se sabe que el BNG no iba a apoyar a un imputado por qué lo dejan presentar».

López avanza que el guión se escribió «con renglones torcidos» y se explaya: «Martínez tiene su carácter y es cómo es, de hecho cuando la tercera vía se intentó poner sobre la mesa por poco le da un ataque». Y por vez primera un «alcalde socialista» reconoce la existencia de una tercera vía públicamente, pero sin citar al tapado. A partir de ese momento «los hechos son conocidos por todos», pero determinante afirma: «Tampoco el arreglo va a ser expulsar».

El contraste lo pone el alcalde de la segunda población más importante de Lugo, Monforte de Lemos. Su regidor, José Tome Roca, de pasado sindicalista, cierra filas y dice: «A mí me parece bien la decisión que tome la dirección del partido, no voy a valorar nada más, en este asunto no tengo nada más que decir». Su lealtad a Besteiro quedó palpable cuando la pasada semana se tropezó con el alcalde de Castroverde, José María Arias, y no se detuvo a saludar a su colega socialista. A la marcha de alcaldes en rescate de Besteiro y del presidente de la Diputación, Darío Campos, también se apunta la alcaldesa de Viveiro, María Loureiro. La regidora contestó a ABC: «Yo apoyo todo lo que dice el presidente de la Diputación y me remito a los comunicados que se han hecho públicos». Sin titubear señala:«No tengo mucho trato con el alcalde de Becerreá porque somos de diferentes comarcas y coincidimos en muy pocas ocasiones». Para rematar recuerda que «el partido tiene un Código Ético y hay que cumplirlo».

El análisis es diferente en el Sur de Lugo. El alcalde de Navia de Suarna, José Fernández, recoge el argumento de su colega de Castroverde y apunta: «Nosotros no estamos en contra de nadie, sino solamente pidiendo que se cumpla un acuerdo firmado por los alcaldes y los diputados provinciales». Fernández carga las tintas contra el BNG y vuelve a cuestionar: «No entiendo que otro partido político condicione nuestros acuerdos». De todo el proceso exonera a José Ramón Gómez Besteiro. En términos similares se expresa el alcalde de Castroverde, José María Arias, quien se remite al documento entregado al secretario de Organización, César Luena.

La expulsión del veterano

Las facciones en el socialismo lucense agolpan. Según fuentes consultadas por ABC, no salen a luz todas las protestas, ni todos los reproches. Algunos regidores temen represalias en las inversiones de la Diputación si mueven el pie del marco, pero los inqueridos por este diario aseguran de forma unánime que tal extremo «no nos consta».

La unanimidad de los alcaldes es absoluta al considerar que «el expediente disciplinario seguirá su curso y no habrá nada que hacer». Ningún regidor próximo a Besteiro aventura una solución y los cuatro apoyos visibles que tienen Martínez consideran que «todo estaría solucionado si se cumple el pacto firmado por los alcaldes y los diputados provinciales».

De momento, el alcalde de A Pontenova, y según algunos munícipes, presidente por accidente, asegura que los que no firmaron el documento reconociendo la verdad oficial no deben temer. Según Campos «no hay ni habrá» problema alguno con los primeros ediles que no han firmado este texto, porque «los entiendo, no es una situación agradable» para nadie del partido.

Las elecciones generales no impedirán que el pulso latente entre las familias se mantenga. Algunos alcaldes, como la regidora de Sarria, Pilar López, aspira a que «el PSdeG pueda conocerse por trabajar por y para los ciudadanos» y no por líos internos.