La CUP vota hoy si apoya los presupuestos de la Generalitat

Día decisivo. El Consejo Político y el Grupo de Acción Parlamentaria (GAP) de la CUP votarán hoy si aprueban la Ley de Presupuestos de la Generalitat para este año, cuyo debate final está previsto para el pleno del Parlament del próximo 8 y 9 de febrero. La formación «cupaire» se reunirá en Vilafranca del Penedès, en el Casal Popular, y se prevé que sobre las 13 horas se conozca la postura final de la formación.

Su eventual apoyo a las cuentas ha ganado trascendencia en la actividad política catalana puesto que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha dejado claro que si los presupuestos tiran adelante la legislatura seguirá y convocará el referéndum en septiembre. Si no, prevé convocar elecciones y el referéndum caerá del calendario.

Los anticapitalistas han considerado este planteamiento como un «chantaje» y consideran que, sin presupuestos, el Govern puede seguir gobernando con las cuentas prorrogadas y convocar el referéndum, aunque el presidente Puigdemont descarta este escenario, según explica Ep.

Durante la negociación la CUP ha insistido en que no se trata sólo de convocar un referéndum y han puesto sobre la mesa demandas que creen mayoritarias en la ciudadanía. Estas demandas, según la CUP, servirían para convencer a los catalanes de que el proyecto para Cataluña no solo se basa en la creación de una república, sino que sea socialmente más justa.

Desde el martes, las 13 asambleas territoriales de la CUP se han reunido para discutir si dan respaldo a las cuentas catalanas, que el Govern ha modificado para satisfacer a los ‘cupaires’ incorporando las demandas de los sindicatos de educación, entre otros puntos.

Sus reivindicaciones sociales

El Govern, de hecho, se ha afanado en los últimos días para alcanzar un preacuerdo con los sindicatos de enseñanza que tienen convocada una huelga para el mismo día del debate de los presupuestos, movilización que choca con una de las exigencias de las CUP.

Otra de las reivindicaciones ‘cupaires’ que sí incluye el proyecto modificado a base de negociaciones es la inclusión de una partida para la Renta Garantizada de Ciudadanía y un impuesto medioambiental a las emisiones de CO2 de los coches. Por el contrario, el Ejecutivo catalán ha rechazado la modificación del modelo fiscal para que sea más progresivo y redistributivo.