Las pérdidas de Motorland fuerzan otra ampliación de capital: ya van 12 en 15 años

El Gobierno aragonés se dispone a ampliar una vez más el capital social de Motorland, su empresa pública propietaria y gestora del circuito de velocidad de Alcañiz (Teruel), que forma parte del calendario anual del mundial de motociclismo de MotoGP.

Hace escasas semanas se formalizó la undécima ampliación de capital en esta sociedad, la que se había presupuestado el año pasado. Con casi un año de retraso se ha formalizado esta inyección económica, siete millones de euros con cargo a las partidas del Fondo especial de Inversiones de Teruel (FITE), que anualmente financian a partes iguales el Gobierno aragonés y el Ejecutivo central.

Pero Motorland necesita urgentemente otros siete millones de euros para mantenerse a flote. De ahí que se haya planificado otra ampliación de capital, que será ya la duodécima en los 15 años de vida que tiene esta empresa pública, la Ciudad del Motor de Alcañiz.

Esos siete millones de esta nueva ampliación de capital también saldrán del FITE. Y, aún así, ese dinero no será suficiente para solventar las delicadas cuentas de esta empresa pública, instalada sistemáticamente en las pérdidas. Por eso, el Gobierno de Aragón le inyectará este año otros 2,5 millones de euros en forma de subvención directa.

En total, por tanto, con cargo a los presupuestos de este año se transferirán a Motorland 9,5 millones de euros, que se añaden a los 10 millones que recibió el año pasado por los mismos conceptos, ampliación de capital y subvención directa.

Desde que nació esta sociedad pública, en 2001, Motorland lleva consumidos 165 millones de euros de fondos públicos. Un informe de la Cámara de Cuentas de Aragón, publicado en las últimas semanas, indica que entre 2001 y 2014 esta empresa del Gobierno regional había necesitado 146 millones de euros para mantenerse a flote, a los que se suman los 19,5 millones que han tenido que inyectársele entre el año pasado y el actual.

Pese a las subvenciones directas concedidas año tras año, Motorland está sistemáticamente instalada en las pérdidas, lo que obliga a llevar a cabo continuas ampliaciones de capital. Esta sociedad pública tuvo unas pérdidas de 7,9 millones de euros y de otros tantos en 2015. Este año prevé acumular unos rojos de otros 9 millones de euros.

El Gobierno aragonés es el accionista mayoritario de Motorland, con un 60%. La Diputacion de Teruel tiene un 20%, y otro tanto el Ayuntamiento turolense.

La Cámara de Cuentas considera necesario encargar una auditoría externa, independiente, que determine el beneficio socioeconómico que deja en la zona la actividad de Motorland, para saber si estos multimillonarios fondos públicos que se inyectan cada año en la sociedad para mantenerla a flote son realmente productivos. Desde hace años, el Gobierno aragonés insiste en que la Ciudad del Motor de Alcañiz es rentable, por el impacto económico que genera en forma de afluencia turística, hostelería y comercio del Bajo Aragón. La Cámara de Cuentas, sin embargo, considera que el Gobierno regional es parte implicada en la sociedad, por lo que esos datos que aportan sus estudios de impacto socioeconómico deberían ser contrastados por técnicos independientes.