Manifestantes increpan a diputados a la salida del Congreso

Unas dos horas después de que Mariano Rajoy consiguiera los votos necesarios para ser investido presidente del Gobierno, varios centenares de manifestantes de la convocatoria «Rodea el Congreso» seguían concentrados frente a una de las puertas del Cámara en la madrileña calle Cedaceros, donde se han producido momentos de tensión, con muchos gritos, pero sin que haya habido cargas policiales.

Agresiones a diputados de C's a la salida del Congreso, después de la sesión de investidura. No, esto no es democracia. pic.twitter.com/UBjTBjPZ5S

— Ciudadanos (@CiudadanosCs) 29 de octubre de 2016

En un momento, algunos diputados del PP y de Ciudadanos que abandonaban el Congreso por la puerta de Cedaceros tras el debate de investidura han sido abucheados por los manifestantes. Diputados de Ciudadanos han denunciado que les han arrojado latas y monedas, al salir de la Cámara Baja.

Varios diputados de Ciudadanos habían utilizado Twitter para denunciar los insultos de los manifestantes, aportando incluso un vídeo del momento de su salida del edificio, informa Ep.

«Hoy a la salida del Congreso me han llamado puta y me han tirado una lata de cerveza. Me quedo con la democracia y no con la violencia», ha escrito Patricia Reyes. El mismo insulto asegura haber recibido Marta Rivera, que en un tuit recordaba que 3,5 millones de votos la han llevado al Congreso y hoy «los fascistas» la llamaban «puta» al salir. «Este es el país que no quiero», ha dicho.

Hoy a la salida del Congreso me han llamado puta y me han tirado una lata de cerveza. Me quedo con la democracia y no con la violencia.

— Patricia Reyes (@PatriciaReyesCs) 29 de octubre de 2016

Sin embargo, otros diputados como el portavoz de Podemos, Íñigo Errejón, o el de ERC, Gabriel Rufián, se han acercado a saludar a los concentrados. Algunos manifestantes han arrojado objetos, por lo que la Policía ha optado por cortar el acceso por la calle Cedaceros, de manera que diputados y periodistas no han podido abandonar la Cámara Baja.

La manifestación denominada « Rodea el Congreso», convocada por la Coordinadora 25-S, apenas contó durante la tarde con la asistencia de unas 3.000 personas para protestar contra la que califican de «investidura ilegítima» de Rajoy. Como habían anunciado, varios diputados de Unidos Podemos hicieron acto de presencia en la protesta, para luego acceder al Congreso y asistir al debate y a la votación de investidura.

A las 18.11 horas de la tarde la cabecera con el lema «Ante el golpe de la mafia democracia» comenzó su recorrido, hacia Cibeles y por la calle de Alcalá para llegar a Sol. Los manifestantes corearon gritos de «no nos representan» y lanzaron descalificaciones contra el PP, PSOE, Susana Díaz y Felipe González. Al expresidente le acusaron de «fascista» y «golpista».

Un fuerte despliegue policial, con decenas de furgones apostados en los accesos al Congreso de los Diputados, impidió que los manifestantes cercaran la sede de la soberanía nacional. El operativo estuvo integrado por unos 1.000 agentes.

Los convocantes arremetieron contra la formacion de «un Gobierno ilegítimo hecho con artes antidemocráticas y manipuladoras» y, en su lugar, se posicionaron a favor de «un proyecto alternativo que no puede tener otra base que la republicana», informa Efe.

Entre los diputados de Unidos Podemos se hallaban el coordinador general de Izquierda Unida, Alberto Garzón, y Rafael Mayoral, así como uno de sus fundadores, Juan Carlos Monedero.

También el diputado por Jaén Diego Cañamero compareció entre los manifestantes para negar la legitimación de Mariano Rajoy para ser presidente: «El voto no da derecho ni a oprimir ni a abusar. Nadie vota para que haya 5 millones de parados o desahucios, sino para que haya futuro», dijo, antes de animar a «tomar pacíficamente las calles y plazas, que son el parlamento del pueblo», informa Ep.

Finalmente Pablo Iglesias, que iba a saludar en nombre de Podemos a los manifestantes, prefirió, según sus propias palabras, « dejar el protagonismo a la gente», aunque al llegar al Congreso por la calle Cedaceros ha saludado a los que por allí pasaban.

A su llegada a la Puerta del Sol, donde estaba previsto que concluyera la marcha, Elena Martínez, de Izquierda Castellana, Ramon Walsh, de la Coordinadora 25-S, y Alejandro Fernández, de la Unión de Juventudes Comunistas de España leyeron el manifiesto en el que han destacado que la investidura del líder del PP es «ilegítima».

Tras dar por «desconvocada» la manifestación, concluyó su discurso con el mensaje de que «La lucha sigue y con más motivos que nunca». Al término de la misma, los manifestantes se mantenían en Sol, coreando consignas como el «Sí se puede», acuñado en este mismo sitio en el marco del 15-M, o «Madrid será la tumba del fascismo».