La imagen de Aznar y Anguita charlando en la cafetería del Congreso ha pasado a la historia
La imagen de Aznar y Anguita charlando en la cafetería del Congreso ha pasado a la historia - CHEMA BARROSO

Elecciones 2016El efecto Anguita «puede resucitar» al votante desencantado del PSOE

El elector del PSOE mayor de 50 años, que se quedó en casa el 20-D, es aquel que recuerda la «pinza» a Felipe González y podría cobrarse aquella factura el 26-J

Tampoco está claro que el «califa rojo» pueda ser la figura que aúne posturas entre Podemos y el sector más reacio a la coalición del electorado de IU

-Madrid Actualizado: Guardar
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El corazón, varios infartos mediante, retiró a Julio Anguita y parece que, amén de la insistencia de Pablo Iglesias, también le ha devuelto a la política en un momento en el que hay un partido, Unidos Podemos, capaz de cuestionar el liderazgo del PSOE en la izquierda. Justamente lo que siempre buscó el antiguo coordinador general de Izquierda Unida.

Aunque no vaya en ninguna lista electoral, el «califa rojo» ha regresado después de varios años de silencio. «Le ha tocado la fibra», resalta Pablo Simón, politólogo y profesor en la Universidad Carlos III de Madrid. Y es que no es ningún secreto su buena relación con Iglesias y tampoco que es partidario de la coalición de la que ha surgido Unidos Podemos.

Pues bien, devolver a Anguita al tablero no saldrá gratis. Es un movimiento que tendrá consecuencias el 26-J, como que podría resucitar al votante dormido del PSOE, aquel que aún se acuerda de la pinza con la que Anguita allanó el camino a Aznar desde 1995 en detrimento de un Felipe González en el punto de mira por la trama de los GAL.

«Si desentierras a Anguita, desentierras a Aznar»

«La jugada tiene un punto de peligro», avanza Oriol Bartomeus, profesor de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Barcelona, quien señala que el riesgo de la maniobra «es doble». Por un lado, «desenterrar» al veterano líder supone que Podemos se sitúe a la izquierda y «en el espacio de lo viejo o lo bastante viejo», considera Bartomeus. Por otro lado, el profesor advierte de que la presencia de Anguita en el entorno de Unidos Podemos «le da una bala al PSOE».

Recuerdo de la pinza

«La aparición de Anguita puede resucitar a una parte del electorado socialista que se acuerda de lo del 95, de la pinza», indica Bartomeus, quien advierte a los líderes de Unidos Podemos: «Si desentierras a Anguita, desentierras la pinza y a Aznar, que es el mayor elemento movilizador del espacio socialista».

«Claro, también puede ocurrir», refrenda Jaime Ferri Durá, profesor en la facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid, quien aún así lo ve algo más complicado en virtud del «desencanto» del votante socialista.

Anguita no ha ocultado su simpatía por el líder de Unidos Podemos
Anguita no ha ocultado su simpatía por el líder de Unidos Podemos - EFE

Bartomeus, por su parte, insiste en que el regreso de Anguita «le da munición al PSOE», además entre una parte del electorado que le hace mucha falta, los mayores de 50 años. Precisamente la última encuesta del CIS subrayó que el 27,5% de los votantes que se abstuvieron el 20-D podría votar al PSOE.

Por ello, Pedro Sánchez tendrá que usar con cuidado el «factor Anguita» y no caer, según Bartomeus en el mismo error que Iglesias. «El PSOE no debe sacar demasiado a sus muertos del armario —véase Felipe González, siempre metafóricamente—, porque puede colarse aún más en el espacio de la vieja política», lo que sería, en palabras del experto, «un pequeño drama».

¿Quién es Anguita?

Antonio García, miembro del Colegio oficial de Ciencias Políticas y Sociología de Andalucía, expone que la presencia de Anguita en el entorno de Unidos Podemos puede espolear a un sector del electorado —personas mayores de núcleos rurales y votantes tradicionales de izquierdas (punto débil de Podemos)— a cambiar su papeleta por la de la formación liderada por Iglesias. Sin embargo, el politólogo avisa de que no todo el mundo conoce al «califa rojo».

«Es verdad que ganas presencia en los núcleos rurales, pero puede ser un error ya que en los núcleos urbanos la gente joven desconoce a Anguita y pueden encuadrar al partido en la izquierda y no verlo como algo transversal», señala García.

Descontento en casa

Otro de los peligros que entraña la vuelta del ex coordinador general de IU la introduce Simón: «Hay riesgo de que aquellos descontentos con la difuminación de su partido tras el pacto puedan abstenerse». O lo que es lo mismo, al núcleo más duro de IU; los electores más cercanos al Partido Comunista (PCE).

Pese a encabezar IU, las diferencias entre Anguita y Garzón son notables
Pese a encabezar IU, las diferencias entre Anguita y Garzón son notables - ROLDÁN SERRANO
«Anguita está agotado políticamente»

«No sé si el fichaje de Anguita es una manera de conectar con esta gente o aún cabrea más a los de Cayo Lara y Llamazares», responde Bartomeus, quien tiene dudas sobre si el histórico dirigente representa, o no, una figura cohesionadora en el seno de IU que pueda validar el acuerdo con Podemos. Convenza o no a los suyos, Simón estima que en un proceso como este, contar con una figura relevante en la historia política de España «le aporta un sello de calidad» al movimiento.

Poco impacto

Sin embargo, Simón cree que el impacto de Anguita, aunque hubiera entrado en las listas, «es menor». El politólogo explica que incluir a personajes de este tipo en las listas se lleva a cabo por dos razones, bien «porque tenga una importante red de organización previa detrás o para generar un efecto cacofónico en los medios de comunicación que les permita marcar el relato».

«Responde a eso, a estar en los medios», confirma Ferri, quien, contundente, estima que «Anguita no significa nada en la política actual, porque está agotado políticamente». Si tiene algo que decir —pese a sus 74 años— aún está por decidir, igual que la influencia en las urnas de su legado. De la misma forma, también está por ver si, visto lo visto, tendremos en 2016 un nuevo cruce de declaraciones entre Felipe González y el «califa rojo». Con lo que llevamos en el historial, no sería lo más raro.

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