Empieza el juicio contra «los ocho de Airbus», que se enfrentan a 64 años de cárcel

Armando, Edgar, Enrique, Jerónimo, José, Raúl, Rodolfo y Tomás son los ocho sindicalistas de la empresa aeronáutica Airbus que se sentarán mañana en el banquillo acusados de protagonizar graves desórdenes en las puertas de la factoría de Getafe (Madrid) durante la huelga general del 29 de septiembre de 2010.

«Los ocho de Airbus» se enfrentan a la durísima petición del fiscal de 8 años y dos meses de cárcel para cada uno y una fianza de 35.000 euros por participar en un piquete que, según la acusación, intimidó y agredió a trabajadores que querían entrar en su centro de trabajo y acorraló y agredió a varios agentes de la policía, los cuales, llegaron a realizar siete disparos al aire. En concreto, la fiscalía les atribuye tres delitos: atentado contra los derechos de los trabajadores, atentado contra la autoridad y lesiones.

El juicio comenzará mañana en el juzgado de instrucción número 1 de Getafe y está previsto que se prolongue hasta el próximo viernes. Siete de los acusados son de CC.OO. y uno de UGT. Estos se sentarán en el banquillo después de no aceptar la última propuesta de la fiscalía de que se declarasen culpables y aceptaran una pena de dos años de cárcel que se mantendría en suspensión durante tres años para que no entraran en prisión.

Los hechos se produjeron a primera hora de la mañana de aquel día en la que CC.OO. y UGT habían convocado una huelga general contra el Gobierno de Rodríguez Zapatero. En las puertas de Airbus en Getafe había decenas de policías antidisturbios y cientos de trabajadores. En un momento dado, se produjo un fuerte enfrentamiento entre ambas partes y varios agentes se quedaron atrapados dentro del recinto. Según han declarado varios testigos, realizaron siete disparos al aire para poder salir de allí.

José Alcázar es el más veterano de los ocho sindicalistas y, además, era entonces presidente del comité intercentros de Airbus en España. Se jubiló el pasado verano con 65 años y ha dedicado a esta empresa 51 años de su vida. «Estoy tranquilo y orgulloso», afirma a este periódico. «No solo estoy orgulloso de pertenecer a Airbus, sino que me considero un privilegiado por haber formado parte de la historia de la construcción aeronáutica española, que arrancó con CASA y siguió con su integración en Airbus».

Raúl Fernández, de 37 años y que lleva 11 trabajando en Airbus, comenta a ABC que «estoy tranquilo, aunque según se va acercando el momento del juicio me noto más nervioso». Es el único acusado de UGT y quiere subrayar que la empresa, desde entonces, se ha portado muy bien con ellos. Y destaca el apoyo recibido por su familia, los sindicatos, así como de numerosas personas y organizaciones, tanto nacionales como extranjeras.