Lorenzo Amor, presidente de ATA
Lorenzo Amor, presidente de ATA - Valerio merino

Los autónomos piden cinco tramos de cotización, el mínimo de 648 euros

La Federación ATA reclama que las altas y bajas se abonen por días, no por meses

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos ATA, la más importante del sector, propone un decálogo de medidas para mejorar la situación de los trabajadores por cuenta propia, que suman más de 3,2 millones, y para reactivar la creación de empleo en nuestro país y que en los próximos cuatro años haya 550.000 emprendedores más.

La más importante de estas medidas, que ya han sido enviadas a todos los partidos políticos, es la de que los autónomos puedan cotizar según sus ingresos reales. Actualmente, sólo existen de forma general dos bases de cotización: la mínima, de 884,4 euros al mes, y la máxima, de 3.606 euros.

ATA considera fundamental establecer otra base mínima similar al salario mínimo interprofesional (SIM), que es de 648,6 euros mensuales.

«Así todo aquel autónomo persona física cuyo rendimiento esté por debajo del SMI estará exento de cotizar aunque sí esté obligado a tributar».

Esta propuesta prevé cinco tramos de cotización: la mínima equivalente al SMI (648,6 euros), la mínima actual de 884,4 euros, otra de 1.200 euros para rendimientos netos de entre 15.000 y 24.000 euros, una más de 1.500 euros para rendimientos superiores a 24.000 euros y la máxima de 3.606 euros ya existente. La medida mantiene la voluntariedad para que aquellos que quieran cotizar por encima de sus rendimientos netos puedan hacerlo.

Cambio de base de cotización

Ligada a esta medida está la propuesta de que estos trabajadores puedan cambiar de base de cotización cuatro veces al año, es decir, trimestralmente, en lugar de dos veces al año como ocurre en la actualidad. «Que en el mundo de las nuevas tecnologías no se pueda realizar esta posibilidad es increíble», subrayó a ABC el presidente de ATA, Lorenzo Amor. «Así se facilitaría la adecuación de la cotización a los ingresos en cada momento», añade.

Otras propuestas inciden en viejas reivindicaciones del sector, como las fechas de altas y bajas y las penalizaciones. ATA pide que en el caso de altas o bajas dentro del mes en curso no se abone la cotización mensual completa, sino la prorrateada por días o, en todo caso, la mitad de la misma correspondiente a la primera o segunda quincena. «No parece lógico que un autónomo se dé de alta un día 18 como hoy tenga y que pagar los 17 días anteriores sin haberlos trabajado; lo mismo sucede en el caso de una baja», denuncian en esta federación.

Lorenzo Amor recuerda el caso de un asociado de ATA que falleció en accidente el pasado 1 de marzo (domingo) y cuya familia no dio parte hasta el día 8 de ese mes. «Aún así, el día 31 tuvo que pagar la cotización de todo el mes de marzo».

Otra histórica petición de este sector es la moderación en las sanciones por el retraso en el pago de las cotizaciones sociales. «Es desproporcional el recargo del 20% por un retraso de tan sólo 24 horas. Es usura. No conozco a ninguna administración que pague sus facturas retrasadas con recargos», critica Lorenzo Amor.

Para ello, proponen un sistema progresivo de recargos que contemple la reincidencia o reiteración en los retrasos. Así, en el primer retraso el recargo será de 5%, en el segundo de 10% y, a partir del tercero, del 20%.

Por otra parte, ATA pide que el autónomo pueda abonar sus cotizaciones trimestralmente y no obligatoriamente cada mes, como ocurre ahora. Explican que cada vez hay más actividades temporales y estacionales que hacen para muchos autónomos difícil pagar las cotizaciones cuando no hay actividad, «por lo que consideramos fundamental que previa notificación se permita poder hacerlo». Así sucede, por ejemplo, con los trabajadores por cuenta propia del sector de la educación, muchos de los cuales no tienen actividad en los meses de julio y agosto y, sin embargo, tiene que cotizar igualmente esos meses.

Inicio de la jubilación

En el mencionado decálogo, hay dos medidas dirigidas a la protección social y ante el fracaso del autónomo. Una, que se considere el inicio para el abono de la pensión de jubilación desde el día siguiente a que alcance la edad legal, una vez reconocida la prestación, como sucede con los asalariados. «Si un trabajador por cuenta ajena cumple hoy la edad legal de jubilación, empezará a cobrar la pensión desde mañana mismo. Sin embargo, si ese trabajador es autónomo, no cobrará su pensión hasta el día 1 de septiembre», matiza Lorenzo Amor. La otra es que se establezca una ayuda de 426 euros durante seis meses para aquellos autónomos que, siendo beneficiarios de la prestación por cese de actividad ("paro de los autónomos") hayan agotado la misma. El coste económico de esta medida es mínimo y sin embargo tiene un gran impacto social».

También proponen otras tres medidas para el fomento del trabajo autónomo y la segunda oportunidad. Así, solicitan que se amplíe la tarifa plana de 50 euros de 6 a 12 meses y extenderla además a autónomos societarios con las mismas características y derechos que los autónomos persona física.

Además, consideran oportuno que se permita que aquellos autónomos que hayan fracasado y se hayan acogido a la denominada segunda oportunidad puedan reemprender con la tarifa plana de 50 euros y acogerse a todos aquellos incentivos y medidas de apoyo que tienen los nuevos emprendedores. Asimismo, piden Inclusión de los créditos públicos en los mecanismos de segunda oportunidad para autónomos como personas físicas.

«Consolidar también significa eliminar trabas», afirma Lorenzo Amor. «Cuando se nos ha escuchado, ha funcionado; sólo hay que ver el impacto de medidas como la tarifa plana, los planes de pago a proveedores y el buzón del fraude», insiste.

Esta Federación argumenta que, tal y como se ha demostrado durante la crisis, «a España le va bien cuando a los autónomos les va bien» y que no se puede excluir a un colectivo que es ya responsable de uno de cada tres puestos de trabajo que se crean en nuestro país. Amor añade que «solucionar la vida a los autónomos es una de las mejores formas de promover la creación de empleo» y que «la mejor política para el empleo es apoyar a los que lo crean, y esos, son los autónomos».

Ver los comentarios