Anoeta, terreno maldito para el Barcelona

Ni el Santiago Bernabéu, ni el Vicente Calderón, ni el Sánchez Pizjuán. Tampoco Mestalla. Ni siquiera el mítico San Mamés. No, ninguno de ellos. No hay campo en Primera División que se le resista más al Barcelona en los últimos años que Anoeta, el feudo de la Real Sociedad. Llama poderosamente la atención, por lógica y potencial deportivo, que los azulgrana no hayan sido capaces de ganar en San Sebastián desde mayo de 2007. Por aquel entonces, el técnico del Barça era Frank Rijkaard, el título terminó siendo para el Madrid de Fabio Capello y la Real descendió de categoría con Miguel Ángel Lotina en el banquillo.

Ha llovido mucho desde entonces. De hecho, el equipo donostiarra tardó nada menos que tres temporadas en volver a la élite del fútbol español.

Eso sí, desde su último ascenso puede presumir de una estadística impoluta como local contra el Barcelona, que de cinco visitas a Anoeta (cuatro de Liga y una de Copa) no ha sido capaz de ganar en ninguna. Es más, balance culé es prácticamente de equipo pequeño: tres derrotas, dos empates y un promedio de dos goles encajados por partido. Pep Guardiola, Tito Vilanova y Gerardo Martino tuvieron la ocasión de dirigir a un grupo ganador, pero siempre tropezaron con la misma piedra.

El precedente más reciente data del 22 de febrero de 2014, en la segunda vuelta de la pasada Liga. El Barça visitó a la Real en plena lucha por el liderato, pocos días después de hacer un gran partido en Champions ante el Manchester City (0-2) y perdió claramente por 3-1. Se adelantaron los de Jagoba Arrasate por medio de un gol de Song en propia puerta, Messi empató antes del descanso y en la segunda mitad dos tantos de Griezmann y Zurutuza terminaron por hundir a los culés. De aquel choque siempre quedará el enfado de Xavi, a quien Jorge Pautasso (Martino fue expulsado) tuvo calentando en la banda para luego no hacerle jugar. Diez días antes de aquella dolorosa derrota, el Barça empató a uno en el mismo escenario en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey (2-0 en la ida disputada en el Camp Nou).

En enero de 2013, Tito Vilanova dirigió en Anoeta su último partido antes de marcharse a Nueva York para intentar recuperarse del cáncer que le arrebató la vida en abril del año pasado. Su Barça, que acabó sumando cien puntos en la Liga, cosechó la primera derrota del curso ante la Real Sociedad (3-1) en un encuentro que empezó ganando por 0-2 gracias a dos tantos de Messi y Pedro. En la segunda parte, los donostiarras, beneficiados por la expulsión de Piqué y espoleados por su público, remontaron merced a dos dianas de Castro y Aguirretxe.

Por su parte, a Pep Guardiola también se le atragantaron sus dos desplazamientos a San Sebastián. En la temporada 2010-2011, pocos días después de conseguir ante el Real Madrid el billete para la final de la Champions, el Barça cayó en la capital guipuzcoana por 2-1. Se adelantaron los azulgrana con un gol de Thiago Alcántara, pero luego se relajaron y permitieron la remontada de una Real Sociedad que estaba muy necesitada en la parte baja de la clasificación. Ifrán y Xabi Prieto sellaron la victoria. La secuencia estuvo a punto de repetirse en la tercera jornada de la temporada siguiente, pero la reacción txuri-urdin al 0-2 inicial de Pedro y Fàbregas solo dio para un empate.