Nuevos trazos para Sancti Petri

Devolver el sentido a la península reinterpretando los valores arquitectónicos y espaciales del pasado. Esa es la declaración de intenciones del estudio sevillano BakPak Arquitectos con su proyecto 'Bosque Pesquero', elegido por el Consejo Económico y Social para renovar y poner en valor el poblado de Sancti Petri.

Del antiguo enclave almadrabero sólo quedan escasas edificaciones que quedaron en pie tras la demolición de 2008. Hoy día están bajo peligro de derrumbe por sus malas condiciones, de ahí la necesidad de volver a levantar el poblado y convertirlo en referente del turismo náutico-deportivo, cultural y de ocio, respaldado por su singularidad. Y se plantea estructurar todos sus usos entorno al mar, por su historia, y generar un lugar de encuentro y esparcimiento.

'Bosque Pesquero' se define como un ejemplo de sostenibilidad y eficiencia por las medidas y sistemas que debe incorporar; así como el desarrollo sostenible de los espacios libres y la selección de materiales. En este sentido gira la premisa de reducir al mínimo el tráfico rodado en la península, dando prioridad a bicicletas y peatones.

Para dar más espacio libre, en el centro se ubica el elemento que da nombre al trabajo, un pinar de 18.000 metros a modo de parque público. ¿Por qué pinos? El plan de usos del trabajo explica que la densa sombra que ofrecen actúa a modo de veladores naturales y, por otra parte, en referencia al Parque Natural Bahía de Cádiz, donde son habituales. El bosque conectará la península en los cuatro puntos a través de caminos y plataformas de madera.

El paseo marítimo y las playas -la sur, que quedó invalidada por el viario actual se recupera- complementan los sistemas de espacios libres previstos.

En concreto, el espacio libre diseñado supone un 59% de la superficie total del ámbito de actuación de la península (98.327 metros cuadrados). Un 28% está dedicado a cinco usos globales propuestos: pesquero, náutico-deportivo, varadero, dotacional y complementarios. Con esta distribución, 'Bosque Pesquero' concluye que solo será edificado el 17% de Sancti Petri.

El plan propone parcelas compactas monotemáticas, diferenciadas por usos y ubicadas en el lugar más apropiado para cada una de las actividades.

El uso pesquero se ubica en cuatro de las seis naves junto al muelle, las antiguas casas de los temporeros. Allí se instalará la Cofradía de Pescadores, una pequeña lonja artesanal, segundas ventas y almacenes y un módulo de armadores. Y se dotaría de un puerto con 96 metros, con 36 puntos de atraque.

Junto al pesquero, el uso náutico-deportivo es otro de los puntos fuertes de la península de Sancti Petri. En este caso, se respetan y mejoran las instalaciones de los clubes existentes y se crea el nuevo Club Náutico y Puerto Deportivo Caño Alcornocal, dando fachada al caño que lleva su nombre. El resto de instalaciones, que se mejoran, son el club Caño Chanarro, las oficinas de la APPA, el Centro de Actividades Náuticas y la Asociación de Pescadores Jubilados. El Club Náutico Sancti Petri además amplía espacio con nuevas construcciones y reutilización de la antigua Cruz Roja y una vivienda. Estas instalaciones se complementan con cinco varaderos.

Comercio y hostelería

Entre los usos complementarios que se perfilan en el poblado están el comercial y el hostelero. El primero supone el 3,4% de la superficie de la península y está ideado para la venta de productos relacionados con la mar y el contexto de Sancti Petri, con una estructura tradicional y potenciando la denominación de origen, el producto gastronómico, el comercio de mercadillo y la artesanía en todas sus facetas. Así, se plantea un pequeño mercado de pescado fresco al por menor.

El espacio dedicado a la hostelería será de un 2,7% de la superficie y 'Bosque Pesquero' plantea una oferta contextualizada en la cultura marítima y pesquera del poblado. Su localización tiene vistas a la Punta del Boquerón y el Parque Natural Bahía de Cádiz.

Para complementar los servicios del futuro poblado, se incluyen usos cultural y social, religioso, de socorrismo, baños públicos y un punto limpio.

El trabajo de BakPak Arquitectos propone que en todo este espacio, la nueva arquitectura dialogue con las edificaciones preservadas. El proyecto, que se desarrolla mediante fases, se estructura mediante un módulo de planta trapezoidal que se agrupa generando conjuntos. Las paredes exteriores son de fábrica de ladrillo en color blanco, las fachadas a espacios interiores son de madera de pino tanalizado y las cubiertas, de cerámicas vidriadas blancas.

Pero no todo son nuevas construcciones en 'Bosque Pesquero', donde se preservan algunas edificaciones, como el caso de la torre de depósitos de agua, la iglesia, las cinco construcciones de 'La casa del Capitán' y las seis naves que fueron viviendas de temporeros.