EE UU y las armas

Apenas han pasado unas pocas semanas de la tragedia de Newtown y de aquella supuesta reacción política contra la libertad de uso de las armas en Estados Unidos se ha evaporado como un espejismo. Cuando dejaron de televisarse las imágenes de duelo, de los funerales, de los niños llevando velas, desapareció la supuesta conmoción social. En Estados Unidos lo que no sale por la tele no existe. Newtown es ya lo mismo que Columbine, un tiroteo más de los muchos que jalonan la historia reciente de los Estados Unidos. Se habló de legislar contra el uso de armas pero no se ha vuelto a saber nada, y casi como si fuera un chiste de humor negro la Asociación Nacional del Rifle se ofreció a colaborar para evitar que algo así pueda volver a ocurrir. Me pregunto cómo. ¿Quizá armando a los profesores para que puedan acabar a tiros con el próximo psicópata? Me temo que harán falta más dramas como el provocado por el joven Adam Lanza para que ese país, tan acostumbrado a las armas desde su fundación, reaccione de verdad.