Economia

Las subidas fiscales disparan los ingresos por IVA y Sociedades

Hacienda investiga 997 denuncias por fraude fiscal interpuestas por particulares contra contribuyentes

MADRID. Actualizado: Guardar
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El Gobierno prevé que los cambios legislativos introducidos en los tributos disparen la recaudación de cara al cierre de 2012 y cree que eso permitirá cumplir los objetivos de déficit. El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, aseguró ayer que la mejora de los ingresos detectada en septiembre -que permitió reducir los números rojos de la administración por primera vez este año, del 4,77% del PIB al 4,39%- se ha mantenido en octubre. En ese sentido, adelantó que en el décimo mes del año la recaudación por IVA creció un 4% y la de Sociedades un 40%.

Ferre explicó que ese incremento obedece, principalmente, al efecto sobre las cuentas públicas de la subida de gravámenes del IVA que entró en vigor el 1 de septiembre, que elevó el tipo general del 18% al 21% y el reducido del 8% al 10%. El incremento del 11,9% que registró en septiembre la recaudación por este impuesto, explicó, fue fruto de los devengos derivados de los adelantos de compras realizados en agosto por muchas pymes y autónomos para anticiparse a la subida, y de las importaciones. Un «acaparamiento», según sus propias palabras, cuyas consecuencias todavía se notarán en los resultados de octubre, aunque en menor medida.

El secretario de Estado aclaró, además, que la subida de tipos hará posible cumplir a finales de año el objetivo presupuestado. Gracias a ese aumento, en términos acumulados en los diez primeros meses la caída de la recaudación por IVA se reducirá al 4%, tasa inferior al 5,3% registrado hasta septiembre y lejos del 10% que arrastraba allá por el mes de mayo. Los ingresos por este tributo indirecto se acercan así al objetivo marcado en los Presupuestos Generales del Estado, que contemplaban un descenso del 3,3%. ¿Y por qué la subida del IVA no hará crecer la recaudación respecto del año anterior? Porque «es previsible una caída del consumo», zanjó.

Ferre también adelantó que las primeras estimaciones del pago fraccionado en el Impuesto de Sociedades son «claramente positivas», ya que Hacienda prevé que en octubre la recaudación aumente «cerca de un 40%» frente a la cifra de 2011. En ausencia de las medidas tributarias aprobadas, que tienen por objeto acercar el tipo efectivo de pago al tipo nominal, la recaudación por pagos fraccionados habría descendido.

Hacienda cree que estas cifras ofrecen indicios «muy positivos» de que se van a cumplir las previsiones de ingresos, lo que «permitirá alcanzar el objetivo de déficit y recuperar la confianza del país», así como «mejorar la financiación».

Denuncias

Por otra parte, fuentes de la Agencia Tributaria desvelaron que este organismo recibió hasta mediados de octubre 997 denuncias presentadas por ciudadanos particulares contra contribuyentes por fraude fiscal, que han dado lugar a planes de inspección. La cifra supone un incremento superior al 50% respecto de las 646 denuncias presentadas en todo 2011, o las 610 de 2010 o las 640 recibidas en el año 2009.

Las fuentes consultadas se declaran sorprendidas por la «solidez» y la «fundamentación» de esas quejas. «Lo atribuimos al aumento de la conciencia fiscal», resaltan. La Agencia Tributaria asegura que su motivación es «variada» y que no se denuncian incumplimientos relacionados con un impuesto concreto, sino determinadas «operaciones», de sectores como el inmobiliario, en el que puede haber conductas fraudulentas que afecten al IRPF e IVA o a Sociedades e IVA. El denunciante, explican, suele ser alguien que conoce bien el sector implicado en esas actuaciones, y hay un descenso de las acusaciones derivadas de «manías personales». Una vez iniciada la inspección, la probabilidad de que deriven en una regularización es cercana al 100%, aseguran desde el fisco.

Hacienda activará en unos días un mecanismo para que los ciudadanos puedan formular denuncias relacionadas con pagos en efectivo superiores a 2.500 euros. La nueva ley antifraude los prohíbe, pero fija un margen mayor (hasta 15.000 euros) para los pagos efectuados particulares por no residentes.