Los jueces avisan a Moliner: «Con nosotros o contra nosotros»

Gonzalo Moliner no pudo aplacar los ánimos de los jueces, que cada vez con mayor fuerza apuestan por paros, cuando no por una huelga que tienen legalmente prohibida, si el Gobierno no da marcha atrás con su reforma de la Administración de Justicia. La reunión entre el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y los representantes de las cuatro asociaciones de la magistratura terminó con un serio aviso a Moliner: «O estás con nosotros, presidente, o estás contra nosotros».

El presidente del consejo, del que el Ejecutivo esperaba que ejerciera como una suerte de mediador, finalmente tuvo que mojarse. Se comprometió a «liderar» las reclamaciones de la carrera ante el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón. Eso sí, siempre y cuando el pleno del órgano de gobierno dé el visto bueno a esas peticiones. Por lo pronto, el CGPJ convocará un pleno extraordinario el 4 de octubre para estudiar la polémica reforma del Estatuto Orgánico de los jueces. La anulación de este proyecto, que limita los permisos de los jueces y la actuación de los sustitutos, se ha convertido en el principal caballo de batalla de las asociaciones, que también reclaman más inversiones en la Administración de Justicia y que el Gobierno retire la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que apunta un nuevo sistema de elección del consejo.

La reunión tuvo lugar, ayer, después de que el pasado viernes las juntas de jueces y fiscales acordaran medidas de protesta -como el cumplimiento estricto de horarios- si el Gobierno no retira sus proyectos. La junta de jueces de Madrid, incluso, llegó a pedir la dimisión del Moliner tras acusarle de ocultar a la carrera la envergadura de los cambios que estudia el Gobierno. La portavoz del consejo, Gabriela Bravo, trató de tranquilizar los ánimos tras la reunión. Insistió en que Moliner estará «a la cabeza» de los jueces «como su máximo interlocutor», si bien no aclaró si el presidente pedirá en breve una reunión con Ruiz-Gallardón para abordar la crisis abierta entre el Ejecutivo y la magistratura. «El diálogo y la negociación son las vías más adecuada para dar respuesta a esas reivindicaciones», señaló Bravo.

En pie de guerra

Ni las palabras del máximo responsable del CGPJ ni las de la portavoz tranquilizaron a los representantes de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Jueces para la Democracia (JpD), Francisco de Vitoria (FdV) y Foro Judicial Independiente (FJI). Todos los colectivos mantuvieron la velada amenaza de paros. La APM destacó que la carrera judicial se ha unido para decir «basta» y para «defender la independencia judicial». Desde JpD advirtieron de las «consecuencias imprevisibles» y el «grave conflicto» que puede estallar si el Gobierno se niega a negociar con la judicatura las reformas que tiene en proyecto. Los responsables de Francisco de Vitoria destacaron que las modificaciones que plantea Ruiz-Gallardón atentan contra «independencia judicial», mientras que el FJI, que insistió en que la «pelota está en el tejado» de Justicia y que solo el Gobierno puede desbloquear esta situación, recordó que las demandas de todas las asociaciones no son corporativas, ni siquiera económicas, sino que van en beneficio de toda las ciudadanía y sus derechos y libertades.