PINCHITO MORUNO

SHO SHIN LU, GUA CHAI

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Es un viejo dicho de la región de Fui shai, justo a dos kilómetros de la muralla china, cogiendo por la variante de Benalú. Traducido resulta «Yo me como el lomo y tú termina eslomao».

Llevó ya dos semanas tratando de transformarme en chino, comiendo arró en blanco hasta pa merendá y la verdad es que estoy una jartá de delgao, no por que el arró no me alimente, si no porque me he empeñado en comérmeloscon los palillos y llevo menos aciertos que Arenas presentándose a unas elecciones andaluzas.

Además reconozco que en la cultura china hay algo que me pone malo y es que no consumen piquitos. Para colmo, todo el día haciendo reverencias, como si se estuvieran comiendo permanentemente un dobladillo de caballa y no quisieran mancharse el chi pi (el pechito, en chino).

Fijaté tú que hace unos meses los pobres chinos míos, ellos que son de poco hablá, eran los culpables de todo. Los acusaban hasta de que los bambitos que vendían eran muy malos y a los estampaos se les ponían mustias las flores a los tres días. Los que tienen el patriotismo subio, que hasta la sangre, más que roja, la tienen roja y gualda, decían que ellos, los chinos, eran los culpables de todo. Los inmigrantes, decían, les quitan el puesto a los españoles, recordándonos aquellos discursos antiguos de la Edad Media cuando los de la Apostólica y Romana les daban caña a los pobres musulmanes. Y yo me pregunto como podían ser malos unos tíos que nos trajeron los alfajores de Medina, tes qui ya Cid Campeador.

Pero ahora resulta que los chinos, de ser un peligro traido y consentido por los rojos, han pasado a ser una bendición y hasta el del Mercadona, el Hacendado, ya nos los pone de ejemplo, como dejando caer que tenemos que trabajar para los «hacendados» 16 horas pero con sueldo de cómo si trabajaramos medio minuto y, además, callaitos y agachando la cabeza. Qué curioso que se ha pasado de pedir inspecciones contra los orientales a ser un ejemplo ciudadano. Qué arte para manejarlo todo según les convenga.

Los hacendados quieren que esto vuelva a ser como Dios manda, como el proverbio chino de la región de Fui shai, justo a dos kilómetros de la muralla china, cogiendo por la variante de Benalú. Quieren comerse todo el lomo y toda la manteca y que nosotros terminemos eslomaos. No nos equivoquemos, no es el bien de España, es el bien de los hacendados el que defienden. No podemos agachar la cabeza y seguir tragando.