Los Flores se sientan hoy en el banquillo por el crimen de la Junta de los Ríos

No ha transcurrido ni un mes desde que se sentaran en el banquillo, y ahora los hermanos Flores volverán a hacerlo por otro delito de sangre. En esta ocasión serán nuevamente Francisco y Fernando Flores Nieto los que se vean las caras con la Justicia, acompañados por sus hermano José y otro pariente, José Flores Heredia.

Los hechos por los que se les juzgará en la Audiencia Provincial de Jerez se remontan al 9 de noviembre de 2007, cuando los cuatro procesados acordaron un plan criminal que desarrollaron en la barriada rural Junta de los Ríos (Arcos). Así consta en la calificación del fiscal, que relata que se aprovecharon de que era noche cerrada para aproximarse a la vivienda de Antonio Estrada Iriarte y Catalina Ruiz Pato, y captar su atención a gritos advirtiéndoles de que el ganado se estaba escapando.

Cuando la pareja salió al exterior y siempre según la Fiscalía, dos de los acusados se abalanzaron sobre Antonio golpeándole y causándole cortes en la cara con un arma blanca, mientras le exigían que les entregase dinero. Seguidamente le taparon la boca con un trapo impregnado en una sustancia que le provocó un estado de semiinconsciencia y lo introdujeron en la casa, consiguiendo que les llevara hasta el dinero.

Por un botín de 625 euros

Los individuos lograron apoderarse de una cantidad en metálico indeterminada y diversos objetos y joyas, tasado todo en 625 euros. Como consecuencia de ello, la víctima sufrió fracturas, contusiones y heridas múltiples. Mientras todo esto ocurría, los otros dos procesados se habían cebado con Catalina, a quien redujeron de forma violenta y le produjeron un corte en el cuello, propinándole además un pisotón en esa zona y provocándole así la muerte.

Por todo ello, el fiscal les imputa a los cuatro un presunto delito de robo con violencia y allanamiento de morada; un presunto delito de homicidio y otro más de lesiones. Para el primero, pide una pena de cinco años de prisión al igual que para el último, mientras que para el homicidio solicita 15 años. 25 años de cárcel en total, por tanto, junto a una orden de alejamiento con respecto a la víctima por un periodo de 30 años.

Además, tendrán que afrontar una indemnización de 8.268 euros para cada hijo mayor de 25 años de la fallecida (tenía ocho vástagos) y 16.537 euros para los menores de edad; 109.144 euros para Antonio al ser su pareja y otros 61.112 por las lesiones y las secuelas sufridas.